Presos de la cárcel francesa de Vivonne, en el centro del país, se amotinaron ayer y causaron un incendio en parte de ese establecimiento después de haber quitado las llaves de las celdas a un vigilante. La reyerta, que proseguía por la noche, está protagonizada por unos 60 reclusos. La Fiscalía de Poitiers informó que no hubo heridos ni toma de rehenes.