Un gijonés de 32 años ha sido enviado a prisión como autor del apuñalamiento de un joven praviano al término de las fiestas del Cristo de Pravia, el pasado día 7. El presunto agresor fue localizado y arrestado anteayer jueves, tras una ardua investigación de la Guardia Civil. Junto a él está investigado un amigo suyo, que propinó un botellazo en la cabeza a otro joven que salió en defensa del apuñalado, cuya identidad se corresponde con las iniciales I. M. I., quien recibió hasta siete heridas con un cuchillo, aunque afortunadamente pudo recuperarse satisfactoriamente tras varios días de atención hospitalaria.

Los motivos de la trifulca que dio lugar al apuñalamiento siguen sin trascender. Primero se produjo una pelea al término de la actuación de la orquesta en el día grande de las fiestas. Según testigos presenciales, el que luego resultaría apuñalado y el agresor se enzarzaron en un forcejeo y terminaron tirándose varias botellas.

Varios conocidos lograron separarlos, pero la pelea se reprodujo poco después, con consecuencias más graves. Y es que esta vez el gijonés de 32 años iba armado con un cuchillo de cocina que, según la Guardia Civil, había sustraído de un local de las fiestas, lo que habla a las claras de sus intenciones de causar el máximo daño posible. Los testigos señalan que entonces propinó hasta siete puñaladas por la espalda a I. M. I., para luego salir corriendo hacia la avenida de Carmen Miranda, mientras la víctima era pateada en el suelo por varios jóvenes. A pesar de las heridas que tenía, el agredido aún pudo levantarse y salir corriendo detrás del atacante, dejando un reguero de sangre.

Ingreso en la UVI

Según los testigos, incluso cuando era atendido por el personal de una ambulancia quiso salir de allí en busca de su agresor. Luego fue trasladado al Hospital San Agustín de Avilés, donde quedó ingresado en la UVI. Aunque al día siguiente ya fue ingresado en planta, el herido permaneció hospitalizado varios, sometido a vigilancia médica constante, ante la posibilidad de que empeorase.

Tras el apuñalamiento, la Guardia Civil inició las pertinentes investigaciones que no dieron su fruto hasta la tarde de anteayer jueves, en que pudo localizar y detener al presunto agresor, que está investigado por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa. El juez de Pravia le tomó posteriormente declaración y decidió su ingreso en prisión ante la gravedad de la agresión y sus consecuencias.