El Supremo ha condenado a tres años y medio de cárcel por estafa a un hombre que simuló un accidente para cobrar de las aseguradoras y se amputó la mano derecha para darle credibilidad. El condenado tendrá que devolver los 335.000 euros que le ingresaron mediante transferencia tres de las ocho aseguradoras que tenía contratadas. Los hechos se produjeron en la madrugada del día 10 de diciembre de 2007. El acusado, solo o con ayuda de otros, se amputó la mano derecha. Después de hacerse un torniquete, se dirigió con su coche hacia el Camino Viejo de Nules a Moncofar (Castellón) y lo dejó caer por un terraplén. Acto seguido, colocó la mano cortada a los pies del asiento del conductor y, tras incendiar el automóvil con una bolsa de gasolina, llamó al 112 y se tumbó hasta que llegó un policía local, que lo encontró sentado y fumándose un cigarro.