La Policía autónoma vasca investiga si el supuesto suicidio de un niño de 12 años de edad, el pasado miércoles en la localidad guipuzcoana de Éibar, es consecuencia de una situación de acoso escolar. El pequeño dejó una nota con los nombres de otros tres menores a los que atribuye su decisión de quitarse la vida.
El departamento vasco de Seguridad ha confirmado que se está investigando este caso, pero no ha dado ningún detalle sobre lo ocurrido.
Según las primeras informaciones, el menor se arrojó al vacío en la tarde del miércoles desde su domicilio, que se encuentra en un tercer piso, y falleció casi en el acto a causa de las gravísimas heridas que sufrió.
El niño dejó escrita una nota con los nombres y apellidos de tres menores, a quienes atribuyó la fatal decisión que iba a tomar y en la que mencionaba, además, a una persona vinculada a un club de balonmano al que iba a entrenar habitualmente.
El departamento vasco de Educación descartó ayer que el niño hubiese sufrido acoso escolar, mientras que en el club de balonmano han rechazado que fuera "objeto de agresiones, mofas o trato vejatorio" por parte de otros menores en los entrenamientos o en la fase de competición.
La Fiscalía de Menores del País Vasco también ha confirmado que se están investigando estos hechos, aunque ha advertido de que todavía es pronto para determinar si existió algún tipo de acoso que llevase al niño a acabar con su vida.
