Un hombre reconoció ayer en la Audiencia de Castellón que maltrató y abusó de su hija y aceptó una pena de 17 años. La menor relató los hechos a una profesora en una redacción cuando la familia se trasladó a vivir al País Vasco. El hombre, ya condenado por violencia de género, le tiraba objetos y la golpeaba con el cinturón. Aprovechó dos viajes de su esposa y los hijos varones para someter a su hija a las agresiones sexuales.