La joven de 26 años que anteayer jueves murió degollada en Fuenlabrada estaba embarazada y el presunto autor de la muerte, su pareja, acabó con la vida de la mujer porque pensaba que el hijo que esperaba no era suyo, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Según las investigaciones, cuando llegó la Policía hasta el lugar de los hechos -un aparcamiento al aire libre-, se encontró a la pareja de la víctima con las manos ensangrentadas y repitiendo continuamente, como en estado de shock: "El hijo no es mío, el hijo no es mío".

Inmediatamente se procedió a la detención del hombre, de 29 años, y se le llevó a la Comisaría de Fuenlabrada, donde permanece a la espera de que le tomen declaración y pase a disposición judicial.

Sobre las dos menos diez de la tarde del jueves el 112 recibió un aviso alertando de que en un vehículo de la calle Barcelona de Fuenlabrada había una mujer que parecía estar muerta. Los servicios de emergencias se encontraron una mujer con el cuello cortado. El arma le había seccionado la yugular.

Ni la Policía ni los servicio sociales tenían constancia de antecedentes por malos tratos. Los vecinos mostraron su repulsa con un improvisado altar y una manifestación.