La Policía detuvo en Torrelavega (Cantabria), Bilbao y Madrid a tres personas por vender en internet medicamentos gástricos para provocar abortos. Un centenar de mujeres compraron las pastillas. Una chica de Zamora tuvo que ser atendida en el hospital, lo que abrió las pesquisas. El empleado de una farmacia de Torrelavega obtenía las pastillas y el cabecilla atendía en Bilbao las consultas.