La pequeña Nadia presenciaba las relaciones sexuales de sus padres, que las practicaban incluso en la misma cama en la que estaba la niña. "La menor, a pesar de la enfermedad padecida, necesariamente debía entender la significación de los actos que sus progenitores realizaban no sólo en su presencia, sino en la misma cama en la que ella se hallaba", puntualiza el auto del juez que instruye el caso.

La Audiencia de Lérida acordó ayer mantener en prisión al padre de Nadia, Fernando Blanco, por usar supuestamente a su hija para convertir la "beneficencia" en su medio de vida, mientras los Mossos d'Esquadra rastrean los archivos de los padres en busca de más fotos de contenido sexual de la menor.

El caso sobre la supuesta estafa de los padres de Nadia en los donativos para el tratamiento de la niña, afectada según la pareja de una enfermedad rara, abrió el martes otro frente después de que los Mossos d'Esquadra enviaran al Juzgado un informe con fotografías de contenido sexual de la menor, halladas en un lápiz de memoria de sus progenitores.

El abogado de la familia, Alberto Martín, aseguró ayer que los padres de la niña están "escandalizados y muy ofendidos", ya que "niegan totalmente" haber tomado fotos pornográficas a su hija, que ahora tiene 11 años, porque nunca "han hecho nada que la perjudique, ni mucho menos en el ámbito sexual".