Dos excursionistas tuvieron que ser rescatados ayer, uno en Quirós y otro en Onís, al sufrir uno de ellos una fractura en el peroné izquierdo y el otro empezar a sentirse indispuesto porque, según los indicios, estaba sufriendo un infarto. Se trata del segundo senderista que sufre una dolencia cardiaca en tres meses: en octubre, la víctima falleció en pleno camino hacia La Foz, cuando participaba en la ruta de la Santas Reliquias.

El primer aviso se recibió a las 14.17 horas. En la llamada telefónica se indicó que eran un grupo de personas de un grupo de montaña, y que uno de sus miembros se encontraba mal. Se advirtió de que no había acceso rodado al lugar donde se encontraba, porque lo que se movilizó al grupo de rescate de bomberos del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA), que se trasladó a bordo del helicóptero medicalizado.

El grupo de montaña se encontraba descendiendo el pico Ibeo, en dirección Benia de Onís, por la ladera suroeste. El helicóptero pudo aterrizar cerca del grupo de excursionistas y el hombre, de 61 años, fue atendido y monitorizado en el mismo lugar, para luego trasladarlo en camilla hasta la aeronave y evacuarlo al Hospital Comarcal de Arriondas, donde quedó ingresado.

El equipo de rescate dio por finalizada su intervención a las 15.59 horas, pero en ese momento se estaba recibiendo en el centro de coordinación de emergencias otra llamada en la que se indicaba que había un grupo de montaña de excursión y que uno de sus integrantes había sufrido una lesión en el pie izquierdo.

El helicóptero medicalizado, que ya volvía a la base tras la intervención en Onís, se dirigió directamente al lugar de la emergencia, entre 1,5 y 2 kilómetros de la localidad de Bermiego. Los senderistas estaban realizando la ruta de San Melchor en Quirós, y se encontraban en una zona de pendiente y arbolado, lo que dificultaba el acceso del equipo de rescate, por lo que tuvieron que hacerlo mediante dos operaciones de grúa, según explicó el SEPA en un comunicado.

El médico, tras reconocer al herido, de 76 años, le inmovilizó la pierna, al sospechar de una rotura del peroné izquierdo. Con el triángulo de rescate, ambos fueron izados al helicóptero. El bombero del equipo de rescate tuvo que acudir a otro punto de encuentro para poder subir a la aeronave. A continuación se trasladó al lesionado al Hospital Universitario Central de Asturias.