Los Mossos d'Esquadra investigan seis casos de jóvenes de entre 12 y 16 años que pueden estar siguiendo webs que incitan al suicidio, ante lo que están en contacto con la conselleria de Educación y los centros educativos y han pedido que se denuncie cualquier indicio sospechoso.

La Unidad de Delitos Informáticos de la policía catalana investiga cinco casos en el área metropolitana de Barcelona y uno en Lleida sobre estas webs, como la Ballena Azul, que plantean retos o prácticas virtuales y cuyos responsables podrían ser acusados de un delito de inducción al suicidio, penado en el Código Penal con entre 4 y 8 años de cárcel.

Tanto los Mossos como los psicólogos, pedagogos y sanitarios expertos en suicidios consideran que las pruebas que los chicos llevan a cabo siguiendo las directrices de este tipo de páginas no son un juego, sino que forman parte de un delito de inducción al suicidio. De las víctimas que ha habido hasta ahora en Cataluña, ninguna ha llegado a la fase final de 50 pruebas que plantean este tipo de webs para llegar al suicidio.

Según el portavoz de los Mossos, Albert Oliva, los menores de los que se tiene constancia que han participado en este proceso suicida en Cataluña son adolescentes y preadolescentes, que están en una "edad sensible", por lo que son un "colectivo vulnerable". "Se tiene que estar especialmente atento a su navegación por las redes sociales", indicó.