Matías R. V., el joven de Noreña que destrozó la cara a un taxista a golpes en las fiestas del Ecce Homo de 2015, aceptó ayer una condena de dos años de prisión en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Oviedo. El ahora condenado no ingresará en prisión, siempre que pague la indemnización de 20.000 euros impuesta por el tribunal, y que deberá pagar en plazos mensuales de 500 euros.

La víctima, el taxista de El Berrón (Siero) Fernando V. L., cuyos intereses defiende la letrada Raquel Roca, se dio por satisfecho, aunque echó de menos que el joven no le haya pedido disculpas por lo ocurrido, un brutal ataque sin justificación alguna. El chico, que tenía 27 años cuando se produjeron los hechos, en la madrugada del 20 de septiembre de 2015, adujo que no recordaba nada de lo que había pasado esa noche, porque había bebido mucho. Además dijo que era dependiente de las drogas. Esos son los argumentos que planteó su letrada, Carlota García del Río, y que le valieron una rebaja en la petición de pena, que era de cuatro años de prisión en el caso de la Fiscalía y seis en el del la acusación particular, ejercida por la víctima.