Castro, una pequeña localidad de Grandas de Salime, está "en estado de shock" desde la tarde del lunes; desde el momento en el que los vecinos se enteraron del fallecimiento, en accidente de tráfico, de Manuel Magadán López, en la autovía en el puente de Ontón (Cantabria). Aunque afincado en Gijón, Magadán, de 53 años, era natural de esta pequeña aldea grandalesa, a la que ayer aún le costaba digerir lo sucedido. "Es algo muy triste", aseguran los lugareños.
Manuel Magadán nació en Castro, donde aún viven sus padres y también su hermano, muy conocido en la zona por su trabajo en labores de extinción de incendios. Es una familia muy querida y apreciada en la comarca, señalan los vecinos consultados, que refiere que el fallecido "siempre se portó genial con todos, sobre todo con los niños del pueblo". "Tenía aquí a la familia, y cuando podía y tenía días libres, venía a verlos", añaden.
El sentir general de Castro, es por tanto, "de pena absoluta, de un disgusto terrible". "Estamos en estado de shock", asegura una de las vecinas, que acompañó a la madre del fallecido en la tarde del suceso. "Estuvimos todos arropándola en estos momentos tan duros", dice. La noticia corrió como la pólvora por el municipio, y muchos se enteraban tomando el café de lo sucedido. "Debió ser una muerte horrible", comentaron. También en las redes sociales se hizo patente el pesar por la pérdida, y fueron muchos los que mostraron sus condolencias a la familia.
