La comunidad senegalesa en Oviedo ha iniciado una campaña para repatriar el cadáver de Bamba Gueye, el joven fallecido el pasado jueves al ahogarse en la balsa de una finca de la cooperativa forestal Caxigal, en Grandas de Salime, donde trabajaba en la campaña de recogida del arándano desde hacía unas semanas.

Bamba Gueye de 38 años, residía habitualmente en Oviedo, ciudad a la que llegó hace siete años y donde se dedicó a la venta ambulante. Era un acérrimo seguidor del Oviedo, y siempre se las arreglaba, pese a las dificultades económicas, para ir dos o tres veces al campo a animar a su equipo. Un amigo suyo, Masse Dieng, recordaba ayer cómo le había regalado una camiseta del conjunto carbayón. Ahora, sus amigos han iniciado una campaña en Facebook para reunir fondos que permitan el traslado del cadáver a su país natal.

Además, el responsable de Acción Sindical de CC OO de Asturias, Gerardo Argüelles, reclamó ayer una investigación exhaustiva de este accidente laboral. Argüelles trasladó su solidaridad a los compañeros y la familia del fallecido y señaló que "algo falla si el trabajo sigue mermando la salud y hasta ocasionando la muerte a las personas".

A su juicio, con la reforma laboral y la desregulación aumenta la precariedad y hay menos prevención "lo que supone mayor riesgo y un ambiente propicio para la siniestralidad", e incidió en que una Ley de Prevención con más de veinte años "de poco sirve si no se cumple". Este mediodía habrá una concentración en Oviedo por esta muerte.

El senegalés estaba desde hacía unas semanas en la capital grandalesa para la recogida del arándano. La empresa confirmó que la balsa donde falleció no tiene más de cuatro metros de profundidad en la zona más alta. Sirve para abastecer de agua a las plantas y es utilizada por personal especializado en la tarea. Al parecer, el fallecido se acercó a la balsa, cuyo piso es muy resbaladizo, y cayó al depósito. No sabía nadar y se ahogó. Sus compañeros de trabajo estaban entonces comiendo y no pudieron socorrerle.