La Guardia Civil ha detenido en Miranda de Ebro (Burgos) a dos personas, de 45 y 35 años, al sorprenderles cuando estaban robando en el piso de uno de los dos atracadores de una sucursal bancaria de Cangas de Onis (Asturias) esta semana, según ha informado hoy la Subdelegación del Gobierno.
La detención se produjo a primera hora de la tarde de ayer cuando fuerzas de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Gijón y de Burgos se disponían a practicar un registro domiciliario bajo mandamiento judicial en una vivienda de Miranda de Ebro.
El domicilio estaba vinculado con uno de los atracadores del reciente robo con violencia e intimidación perpetrado el pasado 31 de octubre en una sucursal bancaria de la localidad asturiana de Cangas de Onís.
Cuando pretendían entrar en la vivienda, los guardias civiles percibieron que la puerta del domicilio había sido forzada, por lo que adoptaron medidas de seguridad, al escuchar ruidos y pasos en el interior, ya que la misma debía permanecer cerrada y supuestamente deshabitada. Al acceder encontraron en el interior a una pareja ajena al piso -M.J.C.C. de 45 años y D.V.S.M. de 35 años-, que estaba haciendo acopio de objetos y enseres, que ya habían introducido en bolsas para facilitar su transporte.
Su sorpresa y actitud sugerían que se disponían a abandonar el domicilio, cuando fueron interceptados. Las pesquisas practicadas han demostrado que estaban sustrayendo los objetos acumulados cuando fueron sorprendidos, por lo que han sido detenidos.
El atraco a la sucursal bancaria se produjo el pasado martes en la calle principal de Cangas de Onís. J.M.S.V., de 43 años y vecino de Burgos, fue detenido cuando se disponía a salir de la oficina bancaria, mientras que el otro asaltante, J.C.S.G., de 59 años y vecino de Miranda de Ebro, se atrincheró en la sucursal y acabó suicidándose de un tiro tras liberar a tres rehenes. EFE
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