Sexagenario, menudo y natural de Ibias, el taxista de Oviedo acusado de manosear a una clienta de 26 años que no tenía dinero en ese momento para pagar la carrera se declaró en la mañana de ayer autor de los hechos y se conformó con la pena solicitada por el ministerio público, que reclamaba en su escrito de calificación el pago de 3.240 euros. Finalmente no se celebró el juicio previsto en el Juzgado de lo penal número 2 de Oviedo, tras el reconocimiento de los hechos, ocurridos a las siete de la mañana del pasado 21 de mayo.

La víctima cogió el taxi del acusado en la calle Postigo Alto, y pidió al conductor que la llevase a su casa. Cuando llegaron frente al portal, la joven le dijo: "No tengo dinero, voy a casa y te pago". Pero el hombre decidió cobrarse en carne. "Me pagas de otra forma", le dijo a la chica, que se negó en redondo a ese enjuague. El taxista movió entonces el asiento de forma que la joven no pudiese escapar y comenzó a manosearle la zona genital por encima de la ropa.

La víctima logró no obstante escapar y cuando llegó a su casa le contó lo ocurrido a su padre, que fue de inmediato a presentar una denuncia. La Policía localizaría al taxista poco después en la calle Caveda, donde fue detenido por un delito de abusos sexuales que le ha valido la condena de ayer.

Algunos taxistas expresaron su malestar por la mala fama que puede dar al colectivo un caso como éste, aunque, por otro lado, se felicitaron por el hecho de que haya sido condenado, lo que impedirá, en teoría, que pueda cometer hechos similares en el futuro.