La Policía investiga desde la detención este domingo de Ana Julia Quezada, la mujer de origen dominicano nacida en 1974 que llevaba en el maletero de su coche el cadáver del niño Gabriel Cruz, el fallecimiento el 10 de marzo de 1996 de su primera hija, Ridelca Josefina, nacida el 22 de agosto de 1991, han informado a Europa Press fuentes conocedoras de la investigación.

La Comisaría Provincial de Burgos de la Policía abrió ese mismo 10 de marzo de 1996 un atestado por el fallecimiento de la niña, que se archivó por un juez. La niña nació en República Dominicana y era hija de Santiago Gil y de Ana Julia Quezada, que residió en Burgos antes de trasladarse a Almería. En esta segunda provincia tuvo un noviazgo antes de conocer hace poco más de un año a Ángel, el padre de Gabriel.

Según la información del atestado policial abierto en Burgos en 1996, al que ha tenido acceso Europa Press, la muerte de esta otra niña de cuatro años ocurrió en el domicilio sito en el séptimo piso de la calle Camino Casa la Vega, 41, en Burgos, donde residía el matrimonio con dos hijas de Ana Julia. La otra menor tenía entonces dos años.

El cuerpo de su hija de cuatro años fue localizado en el patio interior del piso primero. El padre adoptivo y por entonces pareja de Ana Julia entró en la habitación de las menores y comprobó que Ridelca Josefina no se encontraba en la cama, dirigiéndose a una habitación contigua destinada a cuarto de recreo de las niñas.

Fue desde este cuarto donde vio que la ventana de doble hoja estaba abierta y que su hija adoptiva estaba tendida en el suelo del patio interior del primer piso. Según ha sabido Europa Press de fuentes de la investigación, la Policía no abrió otro atestado después de este del 10 de marzo de 1996, concluyendo que la muerte había sido accidental y no se apreciaban indicios de criminalidad.

La detenida, Ana Julia, llevaba poco más de un año saliendo con el padre de Gabriel

La detenida, Ana Julia, llevaba poco más de un año saliendo con el padre de Gabriel

Ana Julia llevaba poco más de un año saliendo con el padre de Gabriel. Vídeo: ATLAS

La hija que por entonces tenía dos años, tras conocer la detención de su madre en Almería este domingo por su presunta relación con la muerte de Gabriel Cruz, sufrió una crisis de ansiedad que obligó a su ingreso en un hospital de Burgos, según confirman fuente del caso.

En los archivos de la Dirección General de la Policía sobre Ana Julia consta que el 17 de mayo de 1993 se le expidió el visado y que el 16 de junio de 1994 se le concedió la residencia por familiar comunitario, al casarse en España con Miguel Ángel, la persona que encontró el cadáver en la vivienda de Burgos. El 20 de noviembre de 2008 se le expidió el Documento Nacional de Identidad a Ana Julia.

Sin antecedentes en la República Dominicana

Por otra parte, la Embajada de República Dominicana en España ha informado de que la pareja sentimental del padre de la víctima no tiene antecedentes penales.

El embajador de República Dominicana en España, Olivo Rodríguez Huertas, informó que no se tiene conocimiento de que Ana Julia tenga antecedentes penales en su país de origen.

Actualmente la Embajada, que transmite sus condolencias a la familia, se encuentra colaborando con las autoridades españolas que han solicitado información a la institución sobre la dominicana.

Así fueron los 12 días sin noticias de Gabriel

Así fueron los 12 días sin noticias de Gabriel

Así fueron los 12 días sin noticias de Gabriel. Vídeo: ATLAS

La camiseta de Gabriel

El hallazgo por parte de Ana Julia de la camiseta de Gabriel Cruz el sábado, 3 de marzo, puso sobre ella el foco de la investigación de la Guardia Civil, en la que participan especialistas en desapariciones de la Unidad Central Operativa (UCO). Ya antes hubo otros elementos que despertaron la alerta policial, por ejemplo por su incapacidad para facilitar a los investigadores su teléfono móvil.

Ana Julia vistió a Gabriel en la casa de la abuela en la Hortichuela de Níjar (Almería) el 27 de febrero, víspera del Día de la Andalucía y festivo en esta comunidad autónoma. Dentro de las primeras y protocolarias tomas de declaraciones, esta mujer aseguró que no encontraba su teléfono móvil. Poco después, informó de que había aparecido pero de nuevo alegó que se había extraviado al ser reclamado por los agentes del Instituto Armado.

Momento de la detención de la novia del padre de Gabriel

Momento de la detención de la novia del padre de Gabriel

Momento de la detención de Ana Julia. Vídeo: ATLAS

A esto se suma el hallazgo de la camiseta con ADN de Gabriel. La prenda aparece cuatro días después de que fuera visto por última vez el menor junto a una depuradora a unos cuatro kilómetros de las Hortichuelas. Se trataba de la primera pista concreta sobre el niño.

Los investigadores de la Guardia Civil guardaron silencio sobre las dudas que rodeaban a este hallazgo al tiempo que recababan datos sobre la posible implicación de Ana Julia en la desaparición. El pasado viernes se le volvió a tomar declaración, aunque los portavoces de la familia insistían a preguntas de la prensa que estaban tranquilos, desvinculando a Ana Julia de la desaparición.

Los agentes no se explicaban que la prenda encontrada por la pareja del padre hubiera aparecido en una zona que había sido inspeccionada por voluntarios y especialistas por encontrarse a tan solo cuatro kilómetros de Las Hortichuelas. La camiseta interior no figuraba entre el listado pormenorizado que dieron los padres y la propia Ana Julia para ayudar en el rastreo. Tampoco parecía haber sufrido especialmente el deterioro tras días de lluvias y mal tiempo en la zona.

Hasta su detención, Ana Julia Quezada había participado en las numerosas batidas para buscar a Gabriel. Publicó en su perfil de redes sociales varios mensajes e incluso hizo declaraciones a los numerosos medios de comunicación que se desplazaron a la zona. El 1 de marzo explicó a una reportera de 'La Mañana' de TVE que habían enseñado al niño que gritara si se le acercaba un desconocido.

"Esa misma mañana estuvimos desayunando y salió la conversación. La abuela y yo. Le dijimos: 'Tú si ves un desconocido corre, eh, no te pares'. Y mira por donde, ese mismo día desapareció el niño", aseguró a este programa de televisión tras interrumpir unas declaraciones de Ángel Cruz, el padre de Gabriel.

Al igual que Ángel y Patricia Ramírez, los padres de Gabriel (ambos se separaron aunque reconocieron desde el primer momento que tienen una buena relación), Ana Julia daba detalles sobre la personalidad del menor, negando la posibilidad de que se hubiera ido solo por su propia voluntad. "Gabriel sólo no se iría. No se alejaba, se marchaba de casa media hora y volvía. Le decías una hora y volvía", apuntó la ahora detenida por la muerte del menor.