Un jubilado avilesino de 69 años, cuya identidad se corresponde con las iniciales J. B. T., ha sido procesado como presunto autor de un delito de agresión sexual del que habría sido víctima una joven de 14 años, hija de un matrimonio amigo. Los hechos se produjeron, según la denuncia, en una casa situada en una zona de monte del concejo de Cudillero, durante una excursión.
La defensa, a cargo del letrado Pedro Paulino Sánchez, ha recurrido el auto de procesamiento, dictado por el juez de Pravia, al considerar que los hechos no pueden ser valorados como una agresión sexual, al no haberse producido acceso carnal a la menor, ni violencia ni intimidación, tal como sostiene el auto del juez. El próximo martes, la sección segunda de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Oviedo, celebrará una vista para dirimir el recurso por este caso que se produjo en el año 2015. El magistrado Agustín Pedro Lobejón será ponente de la sentencia.
Los análisis de la Policía Científica y del médico forense no hallaron rastro del ADN del hombre en la zona vaginal de la menor, aunque sí restos de saliva en sus ropas. Por otro lado, el examen forense advirtió un eritema vulvar en la adolescente, lo que según el ministerio público y la acusación particular, ejercida por los padres de la niña, bajo la dirección letrada de Luis Tuero, demostraría que se produjo la agresión sexual. La defensa sostiene por su parte que la lesión de la menor no demuestra agresión sexual alguna, puesto que puede haberse producido por cualquier otro motivo.
La defensa también recurre la fianza de 40.000 euros impuesta por el juez de Pravia al procesado, que no llegó a ingresar en prisión, aunque la acusación particular solicitó el encarcelamiento del presunto autor de la agresión. La intención de la defensa es que se rebaje la calificación de los hechos a un presunto delito de abusos sexuales, lo que supondría una rebaja de la pena solicitada por las acusaciones.
