Senador del PP por Asturias

Aforamientos: rigor frente a oportunismo

El PSOE, que no apoyó las medidas de regeneración del último mandato, quiere ahora cambios con tal de llegar a la Presidencia

La institución del aforamiento se recoge en el artículo 71 de la Constitución Española como garantía para el ejercicio de determinadas funciones y no en el 72.3 que invocaba el PSOE en su moción del pleno de la semana pasada en el Senado.

Como todos sabemos, en la actualidad esta es una cuestión polémica y existe un gran debate sobre la conveniencia o no de su existencia. En cierto modo porque se equipara aforamiento con impunidad, algo que no es real pero que en los tiempos que corren debería quedar claro para los ciudadanos.

Como indicaba en el primer párrafo, la pasada semana debatimos una propuesta del grupo socialista que desde el grupo popular rechazamos porque la consideramos oportunista e inoportuna además de contener un discurso partidista y parcial fruto de las urgencias del PSOE en los últimos tiempos. La claudicación de su sentido de Estado con tal de llegar a la Presidencia del Gobierno.

Un cambio más de opinión del partido socialista que en 2015 votó en contra de una iniciativa en términos similares y que además, siendo el partido que durante más tiempo ha gobernado en España, nunca hizo nada para clarificar o corregir esta cuestión. En su propuesta llegan incluso a exceder el ámbito de competencias, ya que proponen la supresión de los aforamientos de los diputados autonómicos, algo que no le corresponde al Senado y que en los parlamentos regionales no están apoyando.

Ahora, no antes, defienden la supresión porque consideran el aforamiento como un privilegio personal, usando el argumento de la igualdad ante la ley, cuando solo promueven la eliminación de unos pocos de los muchos que existen en España y cuando se trata de una prerrogativa del parlamento, no de un privilegio al que pueda renunciar el parlamentario. Una garantía para el ejercicio de nuestras funciones como senadores o diputados.

Desde el Partido Popular, por el contrario, nos tomamos esto muy en serio y, por ello, planteamos en el debate en el Senado una reforma amplia y rigurosa sobre la institución del aforamiento. Una reforma que sea fruto de la reflexión profunda que se constató necesaria en el debate de la semana pasada frente al oportunismo del PSOE.

Nosotros defendemos y así lo volveremos a hacer en el próximo pleno, la necesidad de la creación de una ponencia, en el seno de la Comisión Constitucional, que estudie el aforamiento del artículo 71 de la Constitución para proponer su revisión y limitación. Para adecuar esta institución a los tiempos actuales y las demandas que nos hacen los españoles.

Una reforma que dé satisfacción a las demandas de transparencia y ejemplaridad que nos piden los ciudadanos. Una reforma que, desde el rigor, analice la conveniencia o no de su existencia y en su caso a quiénes y qué cuestiones debe garantizar.

En la línea de lo que ya se debatió y votó en la pasada legislatura con el voto contrario del PSOE. Porque la limitación de los aforamientos es un mandato legal que se recoge en la Ley del Régimen Económico Financiero de los Partidos Políticos que aprobamos en la última legislatura sin el apoyo de los socialistas.

Porque en la pasada legislatura todas las medidas de regeneración democrática y lucha contra la corrupción (más de setenta) fueron aprobadas sin el voto del Partido Socialista.

En el próximo pleno del Senado podremos comprobar si es real o hasta dónde llega el compromiso del PSOE con la reforma y limitación de los aforamientos cuando se vote la iniciativa del Partido Popular. Será ahí cuando veamos si el Partido Socialista y el resto de la cámara se colocan del lado del rigor o prefieren optar por el oportunismo.

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