Con sólo un día de margen, la alcaldesa de Avilés, la socialista Mariví Monteserín, llegó a pensar que se trataba de una inocentada cuando comprobó el pasado 29 de diciembre cómo los concejales del PP se hacían un lío y, tras rechazar los presupuestos, terminaban permitiendo su aprobación "sin querer" al confundirse en una votación. El PSOE avilesino mantuvo esa misma noche una reunión orgánica en la que no se hablaba de otra cosa. Incluso el exalcalde Santiago Rodríguez Vega llegó a bromear con que tan fáciles a él no se las ponían. Alguno pensó que con una oposición así, ¿quién necesita aliados?