La columna del lector

Odiseas tontas

Ir a la compra se está convirtiendo para mí en una pequeña odisea de la que salgo unas veces mejor parada que otras. Tengo una hija muy, muy consciente de la alimentación sana, sanísima y me tiene frita. Así que pertrechada con gafas (fundamentales ya ) y con un esquema claro en mi cabeza de lo que no debo comprar, me voy al supermercado.

Por supuesto frutas y verduras frescas, todo un arsenal de nuevos productos para mí, como la espirulina, la espelta, chía, semillas de lino, quinoa, cúrcuma y un largo etcétera que ahora ocupan en un armario de la cocina el lugar donde antes tenía yo mi harina de toda la vida, mi azúcar (ahora pecado), mi pasta no integral, mi arroz no integral, y otro largo etcétera de cosas que ya no es bueno comer.

A mí que no me gusta hacer la compra y que antes iba a tiro fijo y llenaba el carro en un santiamén, me resulta latoso, pero lo hay que hacer: ir mirando los componentes de cada cosa (no a los conservantes, edulcorantes, gomas espesantes y demás). Soy una santa.

Los % los llevo a rajatabla, en cuanto un producto tiene menos del 60% de lo que dice tener, fuera de mi vista. El pan blanquín y tan rico ya no entra en casa, de 25 cereales para abajo no compra y que no lleve azúcar ni sucedáneos. El aceite de oliva, que es tan sano, pues para freír lo mínimo y en ensaladas tampoco mucho. Y así sucesivamente.

Yo sé que todo esto es por nuestro bien, por mantenernos más sanos y vivir mejor más años, y hay que agradecerlo, pero yo es que me tiro a por lo de siempre, miro un plato de huevos fritos con patatas y chorizo como si estuviera viendo el tesoro de Tutankamón, de vez en cuando me pillan comiendo algo en la cocina de lo "no sano" y a punto estoy de asfixiarme por tragármelo sin masticar para que no me cacen.

Total, que se me va poniendo un dolor de cabeza con tanto mirarlo todo con lupa que, cuando llego de la compra, tengo contracturas múltiples y síndromes diversos y decido tomarme un ibuprofeno para que se me pasen todos los males. Horror, nada más tomarlo me acuerdo de que ahora el "ibu" puede producirme un ataque al corazón

Esto es un sinvivir.

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