Resulta incómodo ver cómo desde el Principado, más concretamente desde Cogersa, se trata a este municipio.

Es noticia estos días el asunto del tratamiento de los áridos que ese consorcio vende "reciclados" cuando parece que están contaminados. Muy grave, teniendo en cuenta que en el punto limpio de Mieres se está cobrando por reciclar el escombro.

Si lo que precede es muy grave, todavía es más irritante que en dicho punto limpio no haya una pesa, y se esté cobrando a ojo de buen cubero, facturando sin ningún tipo de rigor contable. Esto que aquí denuncio es a día de hoy una realidad.

Esto me ha sucedido días atrás, cuando en una reforma de mi casa llegué con un remolque para dar dos portes de 17 sacos de escombro. El operario me dijo que sólo se tiraban cinco gratis y el resto que se calculaba a cuarenta kilos el saco...

Ante semejante tomadura de pelo opté por hacer cuatro portes. Debo decir que mi escombro era limpio, sin hierros u otros materiales, y, sin embargo, se mezcla con tierras, maderas, plásticos, etcétera, etcétera. Mi afán por reciclar... ninguneado.

Tomé con interés semejante desmadre, y en otras visitas al punto limpio observo cómo diferentes empresas basculan maderas, electrodomésticos, pinturas, ramajes... y no se les cobra.

Entendí siempre la máxima de que quien contamina paga, pero la arbitrariedad que Cogersa impone degrada los buenos principios de esa economía circular.

Cuando se ven estas prácticas y se visitan otros puntos limpios para hacer una comparación, se comprende que esa Cogersa de todos los asturianos está regida por quien no sabe o no se entera de lo que está ocurriendo.

En el punto limpio de Oviedo verter muebles tiene coste para las empresas, depositar ocho botes de pintura fue imposible (en Mieres sin problema), arrojar siete sacos de escombro sin problema (en Mieres imposible), tres congeladores de hostelería en Oviedo pagan, en Mieres sin problema. He llegado hasta el punto limpio de Grado, y allí la ley es dura pero es la ley. Absolutamente cualquier residuo es controlado y tratado con el máximo rigor.

Diferentes quejas al respecto se estrellaron contra Paulo, supuestamente el funcionario jefe que desordena y manda en Cogersa.

Mención especial para la tierra vegetal que ofrece Cogersa a cambio de reciclar. En Oviedo una cantidad equivalente a una bolsa de la compra, en Mieres un saco de 50 kilogramos y en Grado 10 litros de capacidad ¿ ?

Me gustaría que Mieres pudiese controlar sus propios recursos y no caer en el descontrol. Animo a la actual Corporación a ejercer el derecho de un control más exhaustivo de los mismos, ya que hoy día se encuentran en manos de otros. A ver si hay suertecilla.