Tenemos la mejor patada para tu culo, cantaba "La Polla Records" en un disco de 1990, titulado "Jubilados". Un disco premonitorio, pues no sé yo si sus señorías no se habrán inspirado en él para discurrir y aprobar una ley que incompatibiliza cobrar una pensión de la Seguridad Social y percibir otros ingresos.
La citada ley había pasado desapercibida hasta que los escritores empezaron a levantar la voz denunciando que si sus ingresos, por venta de libros o derechos de autor, superaban el salario mínimo, perderían la pensión. Pero esa ley no fue hecha, solo, para los escritores. Hace un par de semanas supimos que una viuda de Gijón, que vive en un piso cuyo edificio ha recibido una subvención para rehabilitar la fachada, perderá el complemento que le permitía cobrar la pensión mínima. Es decir, pasará a cobrar 234 euros al mes, pues el resto, los 400 que percibía como complemento, le serán descontados ya que la Seguridad Social entiende que cobrar esa cantidad y haberse beneficiado de la subvención para rehabilitar la fachada del edificio donde vive supone aprovecharse del Erario Público. El primer impulso fue consultar, en internet, la opinión de algún jurista famoso, pero como empecé citando una canción decidí seguir con la música y encontré una sentencia de Rubén Blades que me pareció apropiada: "Si naciste para martillo del cielo te caen los clavos".
Eso lo explica todo. Explica que la Seguridad Social, con la ayuda de Hacienda, interprete la Ley así y vigile que se cumpla. No crean que el caso de la viuda de Gijón es el único. Hay otros muchos que, quizá por tratarse de jubilados, no ocupan las portadas de los periódicos. Ahí está lo que le sucedió a Ángel Seco, un jubilado de Ciudad Real que por participar de figurante, el sueño de su vida, en varios capítulos de una serie de televisión, percibió, por diez días de rodaje, un total de 400 euros, en concepto de desplazamiento y manutención. Pues bien, pasado un tiempo, fue requerido por la Inspección. Y, el hombre, acudió dispuesto a devolver los 400 euros, pero le dijeron que la cosa no iba así, que ya le notificarían la sanción. Poco después recibió, por carta, una multa 12.234,76 euros, un mes de pensión por cada día de rodaje. Recordarán lo mucho que criticamos a la abogada del Estado cuando dijo aquello de que Hacienda no somos todos. Dijo la verdad. Hay que ver el celo con algunos y el poco esfuerzo con otros. No solo esa ley de la Seguridad Social es absurda e injusta, sino que cuando vigilan el cumplimiento de las leyes parece que centran sus esfuerzos en la parte de la población más débil y con menos rentas. Debe ser que resulta más fácil "cazar" al pequeño contribuyente que al adinerado? Y, por supuesto, también es más fácil cobrar.
Concluyo como empecé. Ya ven, hoy me ha dado por la música... Lo digo porque mi consejo, a la viuda de Gijón, es musical, que nadie piense lo contrario. El consejo es que se relaje y escuche a Rubén Blades. La canción es preciosa: "Mientras camina, del viejo abrigo saca un revólver... Esa mujer... Iba guardarlo en su cartera pa que no estorbe... Un 38 Smith and Weston del especial... Que carga encima pa que la libre de todo mal"...
