Compañero Fernando, el título de tu escrito -la "Aldea gala"- me hizo recordar a aquel personaje de una de sus historias. Imaginarás el por qué. Tulius Borricus era un centurión del campamento romano de Aquarium, en "Asterix en los Juegos Olímpicos", que colaboraba con Claudius Mulus para conseguir que éste ganara los Juegos y lo convirtiera en prefecto de las Galias.
Es cierto que en la agrupación socialista de Avilés ganó las elecciones Susana Díaz. La mayoría absoluta de los compañeros y compañeras consideraron que era la mejor candidata para asumir la secretaría general del PSOE en estos momentos.
La democracia es el derecho a decidir, pero también el de discrepar incluso con la mayoría. No es la primera vez que los militantes de Avilés adoptan una posición distinta a la que decide la mayoría del partido. Pero no entiendo, compañero Fernando, por qué te reconoces capacitado para decidir entre una opción política, pero nos imputas a los demás una supuesta idiotez que nos lleva a seguir los dictados de un medio de comunicación para poder formar nuestro criterio.
¿De verdad crees que los compañeros de Avilés se sintieron condicionados por el IBEX 35 o por "El País"? No te dejes llevar por una visceralidad que no tienen ni razón ni sentido. Espero que reconozcas la misma legitimidad a todos los que votaron lo mismo que yo, y que no simplifiques las cosas abriendo dos orillas ente los que os habéis posicionado al lado de la renovación votando a quién había sido secretario general, otorgándoles la condición de los listos, y los que hemos votado a por una nueva secretaria general, que supongo seremos los tontos, y obedecemos el dictado del IBEX 35. Me parece un insulto a la mayoría de los compañeros y compañeras que formamos parte de tu agrupación.
No entiendo por qué consideras que discrepar con la mayoría del partido sea síntoma de alguna enfermedad infecciosa que afecte a la agrupación de Avilés. Evidentemente no es posible saber quién ha acertado en cada proceso de elección de la secretaría general. Lo que sí puedo afirmar es que la historia nos ha dado siempre la razón a las decisiones que asumió nuestra agrupación socialista de Avilés en todos los procesos internos. Y hago esta afirmación porque, gracias a las decisiones tomadas democráticamente en nuestro partido, el PSOE ha liderado la transformación de Avilés desde las primeras elecciones democráticas, con la excepción del mandato 1995-1999 en que gobernó el PP porque Izquierda Unida consideró que sacaría mayores réditos políticos si estaba fuera del gobierno.
Nuestra agrupación se siente muy orgullosa de todos y cada uno de sus representantes, de todos sus concejales socialistas, de nuestros cuatro alcaldes socialistas y de los muchos compañeros y compañeras socialistas de Avilés que han sido diputados autonómicos y nacionales, senadores, directores generales, e incluso consejeros.
La agrupación socialista de Avilés siempre se ha distinguido por contar con hombres y mujeres con un alto reconocimiento dentro y fuera de nuestra agrupación. Y eso debería llenarnos de orgullo. Especialmente porque esa responsabilidad la asumieron como consecuencia de su capacidad trabajo, de su compromiso social, de los resultados obtenidos, y del ejemplar comportamiento político y ético que siempre demostraron en las responsabilidades que asumieron en todas las instituciones. Convertir en negativo ese reconocimiento me parece un acto de falsedad, una zafiedad y una profunda deslealtad con todos y cada uno de los compañeros de nuestra agrupación.
La agrupación socialista de Avilés es un ejemplo de solidez, de seriedad, de rigor, de compromiso y de lucha. Los militantes socialistas siempre nos hemos pronunciado en los debates internos con total libertad. Las listas que ha conformado las candidaturas electorales municipales siempre han sido elegidas siguiendo los procedimientos democráticos vigentes en nuestra organización. Nuestra alcaldesa ha sido elegida en un proceso de primarias (tú ese lo perdiste). La lista de concejales que presentamos a las elecciones del 2015 fue aprobada en asamblea. Y la actual ejecutiva de la agrupación también es el resultado del voto de los militantes (también de la que tu formaste parte en su día). Igual que los secretarios generales siempre han sido elegidos por el voto de todos y cada uno de los compañeros y compañeras. ¿Por qué hablas de puestos conseguidos en un restringido grupo? Me parece muy grave y totalmente falso lo que dices. Y lo peor es que sé que los haces muy consciente de tu falsedad.
De la misma forma hemos elaborado nuestros programas electorales, que siempre han sido fruto del debate y la aportación de todos los compañeros y compañeras de nuestra agrupación. Programas que nos han llevado a asumir la responsabilidad de gobierno y que, junto al rigor de nuestros representantes en el cumplimiento de nuestras propuestas electorales, nos han permitido renovar cada cuatro años la confianza de nuestros vecinos y vecinas. Por eso el PSOE de Avilés siempre ha tenido un amplio respaldo ciudadano. Por todo ello, nuestra agrupación es un ejemplo de rigor político y sobriedad y una de las agrupaciones más sólidas de nuestro partido.
Un partido debe ofrecer seguridad y certeza para aspirar a asumir la responsabilidad de gobierno. Por eso en el PSOE los programas electorales, las resoluciones políticas y las decisiones políticas más importantes son aprobadas y ratificadas por sus órganos internos, elegidos de forma democrática por todos los militantes, y no dependen de la decisión parcial que pueda surgir de una asamblea.
Fernando, no se construye nada ofendiendo y desprestigiando a quienes han estado o están representando muy dignamente las posiciones de nuestro partido y soportando las descalificaciones populistas de la nueva "izquierda" emergente y oportunista. Por cierto Fernando, dado que tú militas en la agrupación de Avilés, deberías explicar por qué hablas de "esa agrupación" cuando te refieres a tu agrupación. ¿Estás dentro o fuera?
