En el Pleno del pasado viernes se aprobaron los impuestos que pagaremos todos los avilesinos en el año 2018 y que suponen una subida, en algunos casos desproporcionada, de los mismos en los términos siguientes:

El IBI: se produce una subida del 3,6 por ciento con carácter general, gravando igual a todas las familias y propietarios. Es necesario estudiar una nueva estructura del impuesto con tipos direnciados de manera que familias, pensionistas y propietarios en general no vean subir año tras año el importe del impuesto de su vivienda habitual. La recaudación desde el año 2013 ha subido muy por encima del IPC, comparen sus recibos de años anteriores.

La plusvalía: se produce una subida del 47 por ciento, no es un error tipográfico. Se trata de un impuesto que no siendo fundamental en el equilibrio financiero del Ayuntamiento puede mantenerse en subida cero de manera continuada en el tiempo. Se trata de un impuesto que deberá de otra parte congelarse dadas las últimas sentencias de los tribunales.

El agua: la estructura del recibo que suma agua y alcantarillado genera un efecto perverso. En los comercios y usos no industriales se produce una bajada del agua en algunos tramos que oscila del 10 al 2 por ciento, presentando una subida del 9,95 para consumos por encima de 21 metros cubicos. El componente del alcantarillado supone en todos los casos una subida del 1,6 por ciento hasta el 67,94. El efecto conjunto es que el recibo en todos los casos y usos presentará subida. Vean la gráfica adjunta.

Con todo esto, en 2018 los avilesinos pagaremos mayores impuestos.

Otra politica fiscal es posible en donde las familias no vean subidas continuas del IBI. La recuperación económica y las nuevas actividades permiten aumentar la recaudación de otros impuestos, no por subidas, sino por mayor actividad que puede compensar la congelación del IBI de las familias.

La creación de empleo debe ser una prioridad que tiene que tener su reflejo en los impuestos, como el IAE, pero también para los autónomos y pymes con la rebaja del agua, real y tangible, la reducción de impuestos a la hostelería, por ejemplo, con la tasa de terrazas. Así como habilitar bonificaciones y exenciones a empresas que creen empleo en la ciudad.

Estos son mis prioridades como candidato a la presidencia del Partido Popular de Avilés.