La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ventanal

Notable en economía

Valoración del trabajo realizado por Luis de Guindos, candidato de España para vicepresidente del Banco Europeo

Cuando andamos próximos a recordar los 33 años de la adhesión de España a la Unión Europea (UE), el Foro Empresarial, al hacer balance de lo que ha supuesto de positivo estas tres décadas y más, ha calificado de "notable" el resultado, obra de la conjunción del Gobierno, agentes sociales y sociedad civil.

Realmente la incorporación fue un salto cualitativo y cuantitativo en el transcurrir de nuestra historia más cercana. Por cierto que el Congreso de los Diputados, por primera vez, ratificó con unanimidad el tratado de adhesión.

Los datos de Euroestat ponen de relieve algunas cifras que indican los logros y cambios desde aquel 24 de junio de 1985. La renta por habitante ha pasado de 8.000 euros a 26.970. España ha recibido más de 150.000 millones de euros en fondos regionales, y para el periodo 2014-2020, España tiene asignados 28.000 millones de euros. Nuestro país es el principal receptor del Programa Erasmus. Las ayudas para infraestructuras, junto a prestamos, superan los 40.000 millones.

La UE fue decisiva en el rescate de nuestros medios financieros, ahogados por la crisis, al prestarnos 41.333 millones de euros, a devolver en 2020, con un plazo ampliable a 2027. Pues bien, el Gobierno de Mariano Rajoy, con la responsabilidad de los ministros Montoro y De Guindos ya ha devuelto a la UE la cantidad de 14.612 millones de euros, el 35% del importe del préstamo. Al parecer es intención del Gobierno seguir devolviendo anticipadamente, lo cual según Klaus Reglign, jefe del programa de rescates, "fortalece la confianza de los inversores en España e incrementa la capacidad de préstamos".

La brújula de estas operaciones la marcó Luis de Guindos, aprovechando el entorno de bajos tipos de interés para realizar amortizaciones. Frente a estas buenas operaciones que demuestran sus conocimientos y habilidades, el PSOE ha pretendido su reprobación para el cargo de Vicepresidente del Banco Europeo y moviendo hilos para que no sea aceptado por Bruselas, incluyendo su posible voto para un candidato irlandés.

La opinión pública española debiera responder a este fanatismo partidista, que no vacila en caer en la felonía y la traición a la patria, con tal de poner palos en la rueda al legítimo Gobierno en el poder. Cuando el PSOE llevó a Almunia y a Borrell a Bruselas y a Solana a la Nato, se consideró por todos como un triunfo español. Margarita Robles e Inés Montero se han mostrado en el Congreso como ejemplos de su bajo nivel político.

El esperado nombramiento de Luis de Guindos como Vicepresidente del BDE, es muy beneficioso para España, imagen incluida, cuando nos han dado zurriagazos a cuenta del secesionismo. Da certidumbre y confianza de país, precisamente cuando se publican, por la UE, los índices de crecimiento de España en 2018, superando las propias del Gobierno, marcando un 2,6 de incremento del PIB.

Votar a niveles internacionales contra el propio Gobierno es una bajeza impropia de un partido que aspira a regir el Estado.

Compartir el artículo

stats