Cuando parece que el Club Deportivo Quirinal no puede crecer más, va y añade un equipo a su ya enorme estructura. Esta temporada cuenta con 24 equipos desde iniciación hasta juveniles. "Son circunstancias, hay veces que tienes más, otras veces menos. Es complicado llevar tantos equipos, pero hay que echarle ilusión y ganas. Así funcionamos, todos los días estar al pie del cañón pensando sólo en los guajes y en trabajar", sentencia el presidente del club, Francisco Medina Toro. "Este es el trabajo de mucha gente. Tengo gente muy buena ahí, que lo da todo por el club", añade.
No es para menos, llevar 24 equipos es todo un reto y convierte al club avilesino en todo un referente de cantera en la comarca: "Nosotros nunca pensamos en ello, no queremos ser nada extraordinario o ningún referente. Somos un club que pensamos en lo nuestro, en seguir sacando esto adelante", sostiene el presidente.
Parece que no buscar ser "nada extraordinario" y preocuparse por los que están en el club, es una filosofía que les funciona: "La gente quiere venir con nosotros, no sabemos por qué es exactamente. Supongo que es por el equipo de trabajo que tenemos y que mantenemos durante muchos años los mismos entrenadores y directivos. Son cosas que van sumando y cuando las cosas se hacen bien los niños y los padres están contentos y se lo cuentan a otros", explica Medina Toro.
El club solo se ha marcado un objetivo deportivo esta temporada: "Este año queremos intentar que el cadete suba a Primera categoría y la verdad que va por buen camino -va segundo a tres puntos del líder- y luego mantener las categorías", señala el presidente. Y es que, cuando se cuenta con tantos equipos a tan buen nivel, es complicado buscar metas: "Llega un momento que poco más puedes pedir, porque ya están todos en donde tienen que estar y mantenerlos así ya es mucho", sostiene.
Y es que el club cuenta con un juvenil en Liga Nacional y otro en Tercera (que esperan suba en los próximos años, aunque esta temporada es complicado); el cadete de Segunda (el que lucha por ascender) y el de Tercera; un equipo infantil en cada una de las categorías: Primera, Segunda y Tercera; un alevín en 1.ª, dos en 2.ª y tres en 3.ª; un benjamín en 1.ª, uno en 2.ª y cuatro en 3.ª; un prebenjamín en 1.ª y dos en 3.ª, y dos equipos de iniciación.
Uno de los obstáculos es encontrar acomodo para los equipos. Los alevines entrenan en el campo de fútbol 7 que tiene el club en el barrio y el resto se reparten por los centros educativos de la ciudad, en el caso de los más pequeños; en La Toba, los infantiles y cadetes; y en Miranda, los juveniles. "La Toba está fatal y masificada. Sabemos que nos hagan un campo va a ser imposible, pero un tercer campo en La Toba, nos daría un desahogo a todos los clubes de la comarca", afirma el presidente del Quirinal.
