El asturiano Álvaro Neil, (Oviedo, 1967) "ciclista payaso", celebró el pasado 19 de noviembre su undécimo aniversario alrededor del mundo en bicicleta. Lleva recorridos la friolera de 149.000 kilómetros por 83 países en una aventura que comenzó en Asturias en 2004. Con 48 años recien cumplidos Neil, que actualmente se encuentra en una isla de Brasil,(Ilhabela), a la espera concluir su periplo alrededor del mundo en 2017.
-¿Cómo va su viaje?
-Bien. Ahora, estoy escribiendo un libro de mis experiencias, pensamientos y filosofía sobre la bicicleta. No es uno especial sobre el viaje, como los otros cinco anteriores. Saldrá para las Navidades y estoy muy ilusionado porque es clave para seguir financiando el viaje.
-¿Dónde está actualmente?
-Estoy en una isla de Brasil, Ilhabela (Isla Bell a). Tenía pensado escribirlo en Río de Janeiro pero la vida allí es muy cara allí debido a los próximos Juegos Olímpicos. Así que llegué hasta aquí y me encuentro que el 17 de febrero de 2016 se cumplirá el centenario del hundimiento de un barco español en el que murieron más de 200 personas, en su mayoría diplomáticos y gente rica. Aquí a ese trasatlántico se le conoce como el otro Titanic, aunque lo cierto es que se llamaba el "Príncipe de Asturias". Vaya casualidad.
-En esa zona es verano....
-Comienza ahora y me viene bien para poder emplear mucho tiempo en escribir . Luego salgo un poco a la playa a hacer ejercicio para mantener la forma y también a ejercitar equilibrio sobre una cuerda. Vivo en una casa sin cama, ni muebles, sobre una colchoneta.
-¿Cómo celebró el undécimo aniversario del inicio de su aventura?
-No fue como el año anterior con grandes sorpresas. Grabé un video de uno de mis espectáculos y lo subí a YouTube. Así también podré contentar a los 10.000 personas que me siguen en Facebook y 5.000 en Twitter y demás amigos que tengo en mi tierra. He cogido fama con mi aventura y me recuerdan por las redes socialesen los sitios por donde pasé.
-¿Cuál es su próximo objetivo?
-Estoy intentando conseguir que un barco carguero que me lleve para Europa aunque está muy difícil. Viajar en avión es impensable al ser muy caro. Mi sueño sería por primavera estar en Europa y recorrer varios países con el fin de que el 19 de noviembre de 2017 pueda llegar a la plaza de la Catedral de Oviedo, justo 13 años después de haber iniciado el viaje. Nunca me imaginaba que podría llegar tan lejos, ya llevo fuera once años, más de 4.000 días.
-¿En este último año qué momento fue el más duro?
-Llegar a lo más al sur de Tierra de Fuego, Ushuaia, un día antes de comenzar el invierno con medio metro de nieve. Me retrasé porque en el Chile me robaron algunas pertenencias. Fue duro, aunque luego tuve suerte y pude conseguir unas cubiertas alemanas con clavos para la nieve. En 2003 estuve allí, pero era verano y se hizo mucho más fácil
-Entonces lo pasó mal...
-No paraba de ver camiones tirados fuera de la carretera y temía que me pudieran atropellar. Muy pocos habrán llegado allí en esas circunstancias. Después, el patrocinador de Tierra de Fuego me regaló un billete de avión a Buenos Aires y pude salir de Usahia. De la capital me dirigí a Brasil, pasando por las cataratas de Iguazú, llegando hasta Mariana en Belo Horizonte.
-Allí hizo reír a la gente sin recursos.
-Fue mi último espectáculo de payaso en un barrio donde hay la mayor prostitución infantil, que son palabras mayores, y la gente sonrió mucho.
-¿Cómo lleva su bici Karma la aventura?
-En Rosario (Argentina) le hice una buena revisión y también la pinté de forma especial para ver si tenía alguna rotura en el cuadro. Está de color azul. Creo que ya aguantará estos 2 años que faltan aunque tenga que llevar 75 kilos de equipaje.
-¿Qué sorpresas se llevó últimamente?
-Varias y agradables. Una ir a dormir en Río de Janeiro a la casa de una persona que conocí en 2003 cuando hacia la vuelta a Sudamérica. Otra, encontrarme también allí a un español que conocí en Shanghai (China). El mundo es muy pequeño. Y también me ayudaron mucho las noticias que me llegaban de mis amigos, entre ellas las del ciclista Samuel Sánchez. Para mí es una persona muy entrañable y me alegro que siga una temporada más en activo con su equipo el BMC. Quiero aprovechar esta oportunidad para saludar a todos mis amigos y decirles que les espero encontrar a todos en mi vuelta a Asturias.
