El cabo de Busto se dibuja en el sinuoso litoral valdesano, enclavado del Paisaje protegido de la Costa Occidental asturiana, estrecha franja costera cuyos elementos dominantes son sus ensenadas abiertas al mar con grandes extensiones de prados, así como acantilados, playas y pueblos con tradiciones marítimas y culturales. Todo este bagaje de valores lo posee sin duda el pueblo de Busto donde tiene lugar esta ruta senderista denominada P. R. AS-4, que recorre la rasa costera entorno al Cabo Busto.
A Busto se accede desde la salida 461 de la A-8 para seguir el curso de la carretera local que finaliza en el mismo cabo. En medio del núcleo rural, se localiza la capilla dedicada a San Bartolomé (74 m.) con aparcamiento anexo y con el panel de inicio de la ruta, que nos guiará en primer término hacia las antiguas escuelas (1901). Proseguimos después por el camino- pista que marcha al frente entre sembrados de fabes y maíz, en dirección al perfil costero. Antes hemos de pasar un crucero señalizado, para seguidamente descender ligeramente por una pista agrícola hasta toparnos con el mirador de la playa de Cueva, contemplando desde allí la playa donde desemboca el río Esva. Después retrocedemos hasta el crucero anterior y girando a la izquierda vamos avanzando con sentido septentrional a la sombra de un pinar hasta un nuevo crucero con un repentino desvío que se asoma al acantilado del Cuerno. Nosotros nos revolvemos a la derecha iniciando un suave descenso a la sombra de eucaliptos y pinos, hasta cruzar un arroyo por un puente de madera tras el cual, remontamos una loma hasta presentarnos de nuevo en la rasa costera, ahora desarbolada en este último tramo.
En el siguiente crucero (57 m.)-2,4 Km. en 1 hora de marcha-, soslayamos la bajada a la playa de Bozo prosiguiendo de seguido hasta el siguiente desvío con nuevo giro a la izquierda que nos conduce al área recreativa de Monte el Cabo, que tiene acceso rodado. Aquí, las nuevas imágenes se posan en la playa de Bozo ubicada a nuestros pies. Llegó el momento de detenernos para admirar un paisaje peculiar con paredes verticales que caen sobre el mar, así como los islotes de La Maura y Las Mochas. Mirando al oriente ya aparece a la vista el faro del Cabo Busto y hacia nos dirigimos por una senda muy señalizada que vuelve a asomarse al mar desde un nuevo mirador que se localiza por encima de los acantilados. El siguiente escalón nos sitúa en el Cabo Busto. (63 ,8 m.) -3,8 Km. en 1 h. y 25 min. de marcha-. Llama la atención la edificación, con su vértice geodésico. El faro es de una sola planta en forma de U que fue inaugurado en el año 1858. En las inmediaciones, se localiza un área recreativa con acceso rodado y las tierras de cultivo que circunvalan el lugar, tienen interés por el yacimiento arqueológico de Vallinas, cuyas excavaciones han puesto en valor diversos elementos como cantos rodados toscamente tallados y demás utensilios de piedra tallada como bifaces, hendidores, raederas, etc. pertenecientes a la industria achelense del Paleolítico inferior. A continuación nos dirigimos al mirador de Punta Faro excelente balconada ubicada en la vertical de los acantilados que superan aquí los 60 m. de altura y donde se observa un trepidante sendero por donde manera muy arriesgada descendían los lugareños para la recogida de algas.
Retomamos el camino variando el rumbo al este y arrimados al perfil costero de la playa Baxada del Vino, nos dirigimos al postrer mirador con diferentes y bonitas imágenes marinas. Una de las variantes de la ruta parte desde aquí, directamente al pozo La Agüera y Busto pero nosotros seguimos la señalización que marcha pareja a la costa mientras vamos observando en el horizonte próximo la llamativa playa del Serrón, la isla del Salto y la Punta Arenoso. Un poco más adelante aparece la playa de Barchinas y sus verticales acantilados cuarcíticos. A la altura de Punta Arenoso, cambiamos el rumbo al sur siguiendo la huella de una pista que nos va acercando al núcleo de Busto entre tierras de cultivo. Entramos por los barrios de Triona y Caleabaxo, hasta concluir en el aparcamiento donde finalizamos esta marcha.
