El título nacional de maratón femenino no pierde el norte. Quien siga con detalle el devenir del maratón español puede dar fe que la asturiana Verónica Pérez, campeona en 2014, cedió el testigo en 2016 a la cántabra Paula González Berodia, reciente vencedora del nacional disputado en Sevilla, con mínima olímpica (2:31:18) que le concedió plaza directa a los Juegos de Río de Janeiro.
Sin embargo, sólo los más recalcitrantes seguidores de la prueba podrían dar una respuesta correcta al nombre y origen de los técnicos que guían a ambas. Y es que ambos son asturianos: Paco Martínez Soliño en el caso de la tinetense y Germán Martínez Álvarez en el de la fondista de San Felices de Buelna. Un dato que indica la calidad de los entrenadores del Principado en la prueba. "Paco siempre ha llevado muy bien a Vero", señala el técnico de la cántabra. Germán, ovetense, es un joven técnico de tan solo 29 años, graduado en el INEF de León, donde provisionalmente reside con su pareja, Paula González y que resulta desconocido para el gran público, incluso en su propia casa, y eso que no hay duda de que es en buena parte el artífice de los éxito de Paula, que tiene nada menos que 14 medallas nacionales.
¿Quién es este tal Martínez? Germán era un mediofondista prometedor en su veintena, que corría en 1:55 los 800 metros tras haber defendido los colores de La Santina, cuando fichó por un club de la comunidad vecina. En esos días una pericarditis, una enfermedad cardiaca vírica sin mayor gravedad le hizo replantearse su condición de corredor para ir adentrándose en el mundo del entrenamiento. Fruto de aquella experiencia trabó contacto con la que desde hace años es su pareja y a la que transformó de ser una mediofondista más del panorama nacional a convencerla que debía saltar de distancia para lograr hitos mayores.
Primero saltó de su prueba natura los 1500, al 3000, luego al 10.000, donde debutó en Lisboa en 2014 junto a la avilesina Alba García, otra pupila de Paco Martínez y de ahí a la ruta. "Si solo llevamos tres años en el fondo, señala Paula González que no es extraño verla por las calles de la capital del Principado. "Es más. Probablemente el año que viene vengamos a vivir y a entrenar bien a Oviedo o a Santander", cuenta Germán. Un traslado de residencia que les costaría menos aún que ese salto de mediofondo a maratón. Una prueba que desmitifica en parte la campeona nacional: "Sevilla fue mi primer maratón y los entrenamientos que habíamos hecho era para hacer una marca mejor .
Sin embargo era un campeonato y buscábamos un título. Como fui con cierto margen puedo decir que aún no sé lo que es sufrir la maratón. Me temo que eso me pasará tarde o temprano en otra ocasión". Un sufrimiento que en todo caso experimentó en los entrenamientos no por cantidad de kilometraje, sino por la intensidad de las series a las que se somete."
Nuestros entrenos se basan en hacer relativamente poco kilometraje para la maratón. No llegamos a pasar de 160 kilómetros a la semana, pero trabajamos mucho la calidad" . Los adapto a las características de Paula que tiene esa punta de velocidad y que lo que es correr un poco por encima de 3:30 el kilómetro no sufre", detalla Germán. Y avanza planes: "Cuando sea más mayor no hay duda que igual tengo que variar porque se vuelva más "diesel." Unos entrenos que no se basan tampoco tanto en tocar asfalto sino ayudarse elíptica para no machacar la musculatura. " Y también como forma de recuperar las lesiones", aclara Paula.
Las lesiones son el termómetro del cuerpo que le dice a Paula que hay que tomarse un descanso obligado. Ha tenido tres graves en su carrera deportiva: rotura parcial en el tendón de Aquiles, piramidal y la última otra rotura en el bíceps femoral en plena preparación del maratón."
Tenía cierta ansiedad por si me iba a recuperar, pero el equipo de fisios que tenemos en el Centro de Alto Rendimiento de León logró que pudiera llegar a tiempo al Nacional de Sevilla". En enero Paula ya se proclamó campeona de España de medio maratón en Torrevieja, una prueba que le sirvió de entreno en la que se estrenó el año pasado y en la que tuvo un debut con título nacional en Granada pero no tan plácido como en Torrevieja o Sevilla . "Aroa Merino, cuarta en Sevilla, que no teníamos controlada nos puso en apuros.No sabíamos que iba un minuto por delante supuso un esfuerzo extra darle alcance. Además que el recorrido era duro, porque el factor altitud estábamos adaptados en León", explican al alimón como a la vez censuran el dopaje, la sombra que se cierne sobre el atletismo. "Soy partidario de sanción de por vida hasta con el primer positivo", afirma el técnico asturiano, que piensa que piensa que Paula puede llegar bien a Tokio 2020 y cuatro años más". En este sentido Paula destaca "que si me respetan las lesiones mi ilusión es seguir hasta cerca de los 40 años que no es una mala edad para retirarse en el maratón . Tanto uno como el otro son conscientes que hoy por hoy una medalla internacional no está a su alcance. "Lo más objetivo es pensar en alcanzar a medio plazo un puesto de finalista en Europa. Si pensamos en más tendrían que darse todas las circunstancias favorables", recalca el carballón.
Entrenará Germán a más atletas? "En principio no me lo planteo. Sí que ayudo a amistades. Paula explica como curiosidad que en Sevilla corrió otra pupila de Germán, "Lucía Fernández Álvarez, una asturiana que fue campeona nacional junior", oro de en una distancia tan antitética como los 400 metros y que corrió por experimentar la magia de la Maratón de Sevilla pasando de la barrera de las cuatro horas.
La campeona nacional y futura olímpica reconoce que por su timidez prefiere pasar desapercibida. "No veas que corte pase cuando me hicieron el homenaje en mi pueblo", recuerda aunque por motivos publicitarios su entrenador trata de que el público conozca a través de las redes sociales cómo es el día a día de una atleta de elite como es Paula. Una atleta del equipo New Balance que reivindica que debían estar mejor reconocidos económicamente por los estamentos públicos los sacrificios que a todo deportista, y en el caso de los atletas, supone alcanzar unos Juegos Olímpicos. Las becas dan para vivir al día" . Y que señala como factor clave de sus éxitos "las ayudas de nuestros patrocinadores, cada uno según sus posibilidades ". Una pareja que no quiere perder el norte aunque el destino inmediato apunte al hemisferio sur.
