Llega mañana, sábado, a los salones del restaurante La Llorea Golf, de Gijón, la cuarta sesión de los Campeonatos de Asturias individuales de ajedrez, que marca la mitad de la prueba. Lo hace con un duelo en la cumbre, el que medirá en la mesa uno de Primera a dos maestros: Enrique Álvarez, del Antonio Rico, e Ignacio Bajo, perteneciente al Real Oviedo.
Ambos mandan tras anotarse tres victorias en otros tantos encuentros y son conscientes de que un triunfo más, y ante un rival directísimo, supondría dar un gran paso. Kike, con blancas, es muy difícil de batir gracias a su gran concepción posicional y buena técnica pero Nacho es un jugador imaginativo y le buscará las cosquillas al gijonés. Mucha atención, que no toda, a lo que ocurra en esa mesa uno.
Muy trascendentes serán igualmente los duelos Nathaniel Capote-Pelayo Quirós y José Alberto Cuevas-David Roiz, todos con dos y medio y a tiro de meterse de lleno en la lucha por el campeonato. Grata sorpresa la actuación del moscón Cuevas, que quizás tenía como meta la permanencia y se ha visto aupado a las mesas "VIP".
El resto de emparejamientos en el torneo principal van a ser: Iván F. Torre (2)-José Manuel Acosta (2); Juan Villemur (2)-Saúl Viñuela (2); Daniel Centrón (2)-Javier Reno (2); Eloy González (1'5)-Samuel Castelao (1'5); David S. Vigón (1'5)-Jesús Ángel Lobo (1'5); Alejandro Ortiz (1'5)-Jonás Prado (1'5); Marcelino Vega (1'5)-Sara Olivares (1'5); Francisco Gómez (1'5)-Berna Blázquez (1'5); Jose Luis Blanco (1'5)-Julio Antonio R. Uría (1); Jesús López de Lerma (1)-Julio Bernal (0'5); Saúl Pérez (0'5)-Eduardo F. Palacio (0'5) y Pablo Rivas (0)-Pablo Rodríguez (0'5).
Por abajo las cosas también están interesantes.En Segunda destacará el duelo entre dos clásicos del ajedrez de Gijón: Fernando García e Ignacio Fernández, que marchan con tres de tres y se conocen muy bien. Otros dos expertos, Marcelino Corredor y Antonio María Díez, con dos y medio, juegan en la segunda mesa. Completan los emparejamientos punteros Daniel Á. Solís (2) y Eduardo Peláez (2'5).
A las cuatro de la tarde darán comienzo todos los juegos, también los de las categorías Tercera y Cuarta, en ese mismo escenario. El ritmo de juego es el ya clásico de 90 minutos "a caída de bandera" con un incremento de treinta segundos por jugada.
