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Raid

Una modalidad que aúna velocidad y resistencia física

El jinete Giovanni Fernández es uno de los referentes asturianos de esta práctica

Giovanni, seguido por otro jinete. LNE

La Federación de Hípica Española define el raid como una disciplina en la cual se pone a prueba la velocidad, habilidad y la resistencia física y psicológica de caballo y jinete, ya que ambos deben recorrer grandes distancias en un día, a través de los más diversos terrenos y contra el tiempo. Por eso, el jinete debe tener la capacidad de dosificar el esfuerzo del caballo, además de llevar un ritmo adecuado, ya que al finalizar la carrera al caballo se le toman las pulsaciones y si supera las permitidas, queda eliminado.

Pues bien, esta modalidad deportiva es la que lleva practicando Giovanni Fernández desde que era pequeño, desde que apenas contaba con diez años. "Esta afición me viene de familia, ya mi padre y mi madre corrían", asegura orgulloso el jinete.

Giovanni Fernández acaba de proclamarse campeón de Asturias, además de alzarse con la Llanes Endurance Cup, una prueba internacional de 87 kilómetros dividida en tres etapas. La reglamentación de la prueba, para que se hagan una idea de la dificultad, es clara: al finalizar cada etapa, en la que no se puede ir por debajo de los 10 km/h, al caballo se le toman las pulsaciones y cuando baja de 64 se para el crono. Así en todas las etapas, menos en la última, que el tiempo se para al entrar en meta, aunque el caballo tiene más tiempo, media hora, para recuperar las pulsaciones. Cuando todo esta OK, se unen los tiempos y sale el ganador. "Es una modalidad muy dura, donde una de las cosas más importantes es saber dosificar al caballo, saber cuándo le puedes pedir más y cuando no", explica el jinete. A lo largo de la carrera hay varios puntos de apoyo, que se utilizan, sobre todo, para refrigerar al caballo.

La Llanes Cup y el Campeonato de Asturias, que consiguió montando a "Maraco", se unen a su ya extenso palmarés donde aparecen campeonatos de España tanto individual como por equipos, además de campeonatos regionales. "Llevo corriendo desde los 10 años, es parte de mi vida", indica. Eso sí, asegura que el raid "es una disciplina muy dura, pero yo sigo porque me gusta, sino no seguiría corriendo". Fernández continúa con esta afición, porque es un hobbie, aunque ya no le dedica todo el tiempo. Compagina esta disciplina con su trabajo de mecánico. "Antes me dedicaba solo a los caballos y entrenaba todos los días, ahora ya no", dice. ¿Y para entrenar hoy en día? "Pues por la noche", señala. Así, es sencillo ver al jinete con su caballo haciendo kilómetros cuando acaba el día. "No tengo otro momento", dice Fernández, que asegura que es "un deporte sacrificado tanto para mí como para los que están conmigo".

El raid es una disciplina poco conocida en Asturias, aunque Giovanni asegura que "hay mucha afición. El problema es que se fomenta y promociona poco y además tienes muy pocas ayudas".

El jinete ovetense se prepara ya para la siguiente cita, que tendrá lugar en mayo en Madrid. Y su reto sería "ganar un Europeo", aunque es consciente de que es muy complicado, pero "nunca se sabe".

Giovanni no está solo en esta aventura. Y es que a su lado tiene a su hermano Abel Fernández, que se encarga de los cuidados de los caballos: alimentación, herrajes y todo lo necesario para que el equino esté en las mejores condiciones. El equipo se completa con Iván Bragado, que es quien entrena a los caballos junto al jinete. "Luego está mi hermano Giovanni, que es quien los corre", explica Abel, que al igual que su hermano también compitió en esta disciplina hace ya algunos años.

A sus 26 años, Giovanni Fernández seguirá haciendo kilómetros con sus caballos hasta que pueda, en especial con "Maraco", "un caballo de casa que lleva con nosotros nueve años", dice. Y es que esta disciplina del raid siempre le gustó. No en vano, fue lo que vio en casa desde pequeño. Ahora es él quien lleva las riendas de una afición que no solo es de él, sino que también forma parte de su hermano. "Se podría decir que es una afición heredada", indica.

Son las 20.00 horas de un día cualquiera, apenas ya hay luz y es probable que Giovanni Fernández esté entrenando con su caballo. ¿Es sacrificado? "Sí, pero me encanta", reitera el jinete asturiano, que se le nota cuando habla la pasión que siente por esta modalidad y por los caballos, algo que comparte con su hermano y con su familia casi desde la cuna.

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