Corren buenos tiempos para el Gijón Femenino. El club gijonés, fundado en el año 2.000, da pasos hacia adelante para recuperar su sitio. Durante sus años de historia, ha logrado alcanzar cotas más altas que las actuales, pero no todos los éxitos llegan con el primer equipo, que también, ya que acaban de firmar una valiosa permanencia en Segunda División con una plantilla plagada de jóvenes jugadoras y apoyadas por la experiencia de otras futbolistas. Su base se encuentra en un estado de salud que progresa por el buen camino, logrando contar con un elevado número de jugadoras que se inician en el fútbol a muy temprana edad. No en vano, el club que preside Francisco José Simón, tiene previsto el próximo año sumar un equipo infantil a sus filas para completar todas las categorías. En la actualidad, la entidad gijonesa cuenta con dos equipos de edad benjamín, uno alevín, un regional (compuesto por jugadoras infantiles, cadetes y juveniles) y el mencionado conjunto de Segunda División. En total, en sus filas militan en torno a 80 jugadoras ya que también cuenta con niñas que se encuentran en el proceso de iniciación antes de pasar a la competición.
Los tabúes en el fútbol femenino también han ayudado a que cada vez sean más las jugadoras que se atreven a calzarse las botas de fútbol para iniciarse en este deporte. Todo suma para que el Gijón Femenino, que colabora directamente con el Ceares en una escuela de fútbol mixto, recupere su sitio. El máximo mandatario, que se estrena esta temporada en el cargo, se muestra satisfecho por la actualidad del club ya que considera que "la mejoría del club se nota, hay más gente comprometida y ayudando, hemos dado un pasito más en el terreno de juego y también fuera de él, estructurando con gente especializada otras facetas importantes". En lo que respecta al incremento de fichas, Francisco José Simón cree que "hubo una época que era muy difícil de encontrar niñas que quisieran jugar al fútbol, pero este año no sé el motivo principal, pero se han apuntado un montón de crías en fase de formación y esa es una gran noticia".
Más que la calidad -que está fuera de toda duda-, al presidente del Gijón Femenino le ilusiona la cantidad ya que son conscientes que hasta la fecha su club se ha convertido en un trampolín para que las jugadoras se formen y acaben dando el salto a otros clubes. Un hecho que no le preocupa, pero quizás algún día la historia pueda cambiar. Uno de los pasos importantes que se vislumbra en el horizonte del club es la de lograr tener unas instalaciones más cercanas al epicentro de Gijón ya que en la actualidad se encuentran entrenando y jugando sus encuentros en los campos de la Federación Asturiana, en Roces. Un futuro que podría estar cercano gracias a su sintonía con el Ceares y al estudio de un campo de hierba artificial anexo a La Cruz. "Tener un campo donde nos podamos desarrollar sería fantástico", explica el presidente. Simón quiere soñar, pero con los pies en el suelo ya que "hasta que no lo vea no lo creo, prefiero ser cauto, aunque no perdemos la ilusión".
El Gijón Femenino ha marcado su mejor gol fuera de los terrenos de juego, donde los tabúes sobre el fútbol femenino llegan a su fin. El optimismo inundan al club gijonés de cara a un futuro prometedor gracias a su cantera.
