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El Sanfer, un club diferente

La sección de fútbol del colegio avilesino, que pasó de 40 a 160 jugadores en cinco años, prioriza la formación y cuenta con un organigrama deportivo como el de los equipos profesionales

Benjamín B. MARA VILLAMUZA

El fútbol no deja de crecer en el colegio San Fernando. La sección empezó con un alevín y en cinco pasó de 40 niños a los alrededor de 160 (incluidas tres niñas) de este año que compiten en 16 equipos. "Todo responde a la inquietud de la dirección, que ha hecho una apuesta deportiva muy fuerte y muy seria", señaló el coordinador de deportes, Fernando Tamargo.

El centro tiene dos equipos de chupetines (4-5 años) que juegan amistosos; dos prebenjamines del torneo intercentros de Avilés y otros dos federados, uno en Segunda categoría y otro en Tercera; un benjamín en Primera y tres en Tercera; un alevín en Segunda y dos en Tercera; y dos infantiles en Tercera.

La prioridad del colegio es la formación de los niños más allá de los logros deportivos, pero la sección tiene marcados como objetivos para el próximo año seguir creciendo, sacar un cadete, y subir al infantil a Segunda, según explicó Tamargo.

Y todo ello a pesar de que los clubes intentan continuamente captar jugadores. "Al final se van pocos porque los padres confían en nuestro proyecto, que es diferenciador porque en el colegio recibimos niños con 4 meses y se van a los 18 años. Eso implica un compromiso formativo mucho mayor que el de un club, que sólo mira lo deportivo", dice Tamargo.

Otro aspecto diferenciador, apunta, es que hay una comunicación fluida entre entrenadores y profesores a la hora de motivar o de orientar a algún niño. "Este año implantamos con éxito una plataforma digital para que estén en continuo contacto", destaca

La figura del entrenador es un referente para los niños y su elección se cuida con esmero. De hecho, la sección cuenta con un organigrama deportivo igual que el de un club profesional encabezado por Manel Menéndez, que jugó once años en Primera División y que es en la actualidad segundo de Oli Álvarez en el Marino. El técnico de los porteros es Noel Soto, un entrenador nacional de fútbol y de porteros que fue tres años internacional con la selección española juvenil en la generación de Casillas y Xavi. El preparador físico es Adrián de Pedro, licenciado en INEF con la especialidad de fútbol, se encarga de los entrenamientos de todos los equipos, tanto a nivel físico como coordinativo y está presente en todos los entrenamientos. "Tener un preparador físico en plantilla es muy diferenciador", dice Tamargo.

Completan el organigrama los entrenadores Geni, ya retirado tras jugar tres temporadas en Primera y los últimos años en el Marino y el Avilés; y Boris, que juega en el Colunga después de siete años en Primera y pasar por el Marino y el Avilés en las últimas temporadas.

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