Se lo juegan todo en centésimas de segundo. Viven de los mínimos detalles. De su reacción en la salida, de su entrada en el agua, de los virajes. Muchos de ellos pueden pasar desapercibidos para el público que se encuentre en las gradas, pero su trabajo constante en esos pequeños detalles pueden marcar una gran diferencia. Buenos conocedores de ello son los nadadores olayistas Alejandro Martínez y Juan Luis Vega, que en el nacional de invierno cumplieron con nota colándose en varias finales. En esta ocasión, pese al gran papel marcado, unas centésimas les privaron de subir puestos e incluso de alcanzar las medallas como en el caso de Vega, que rozó el bronce por escasas seis centésimas. "Da rabia quedarte tan cerca, pero me pondría un 9.5 de nota porque me impresionaron mis tiempos", comenta Juan Luis Vega. Le sigue a la par Alejandro Martínez al asegurar que "el balance es realmente positivo".
Pese a ello, ambos creen aún en el margen de mejora de cara al futuro. Para conseguirlo cuidan con mimo cualquier detalle, todo suma en una prueba de 50 o 100 metros. Su entrenamiento se asemeja mucho a los atletas como Usain Bolt. Esa reacción en los tacos de salida, las primeras zancadas para situarse en una buena posición, pero con el margen de obrar la remontada. Todo cuenta. "Los pequeños detalles siempre marcan, la salida, la submarina, el agarre, la técnica, ahí están las décimas que uno necesita", comenta Alejandro Martínez. Su preparación le lleva a realizar diversos ejercicios para la mejora de los estímulos para lograr una rápida reacción en el pistoletazo de salida. "Suelo tener una reacción de unos 0.60 segundos en la salida, hago ejercicios para ir mejorando esta faceta y después, antes de mi prueba, me fijo en lo que suele tardar el juez en dar habitualmente la salida para tener una idea", confiesa. Sin despreciar en absoluto el tiempo de reacción, el cual Juan Luis Vega considera que es más importante para las pruebas explosivas de 50 metros, el extremeño considera vital la entrada en el agua. "En el 100 es mejor lograr una buena entrada, que sea limpia y con fuerza y a partir de ahí, lograr una subacuática buena, pararte lo menos posible y con una posición aerodinámica buena o realizar buenos virajes", asegura. Son muchas las horas de entrenamiento que se gastan en mejorar estos detalles. "Si me comparo con el resto sé que nado igual o mejor que ellos, pero fallo en esos detalles, lo bueno es que sé que puedo mejorarlos", comenta con sinceridad Vega.
Ambos estarán en la Copa de Clubes de España dentro de un mes, una de las pruebas más importantes en el calendario del Santa Olaya, que lucharán por la permanencia en Primera División. "Tenemos equipo de sobra para mantenernos" y lo suscribe Vega. Ambos continuarán con su exhaustivo entreno en busca de una recompensa que se juega por centésimas de segundo.
Por otra parte, la actividad no se detiene y este fin de semana se disputa en la piscina olayista el memorial "Alberto Balbín" en la que tomarán parte 341 nadadores entre las categorías benjamín y sénior.
