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El kárate como forma de vida

El langreano Carlos Bargados, de 19 años, acaba de lograr la medalla de bronce en el Campeonato de España absoluto, una prueba en la que dice que estuvo "mejor que nunca"

Carlos Bargados, en un entrenamiento en el gimnasio Félix Sotokhan. FERNANDO RODRÍGUEZ

La irrupción de Carlos Bargados en la escena del kárate nacional no es ninguna sorpresa. El joven langreano, de 19 años de edad, ya sabe lo que es conquistar una medalla de bronce en el Campeonato de España absoluto. Lo hizo durante la competición celebrada en Sevilla. Allí, Bargados compitió en la categoría de 75 kilos.

El karateka langreano lleva desde los tres años dedicándose a esta arte marcial. "Comencé a los tres años, con una exhibición, desde ahí y hasta ahora", reconoce. Y es que, de casta le viene al galgo; sus padres son los dueños del gimnasio Félix Sotokhan de La Felguera. Allí adquirió enseñanzas por los cuatro costados. Su padre, Félix Bargados, es séptimo Dan y campeón de España kárate.

El langreano cumple su segunda temporada en la categoría absoluta, aunque también participa en las pruebas de sub-21, la cual le corresponde por edad.

La prueba del Campeonato de España absoluto de Sevilla estaba marcada en rojo en su calendario desde hace varias fechas. "Quedé muy contento con los resultados, aunque sé que podía haber ido mejor", argumenta, con su auto exigencia característica. Para Carlos Bargados, la competición empezó "bien", pero en el segundo combate, el cual gana, sufrió una pequeña lesión. En el tercer combate, en el que se juega el pase a semifinal, esa pequeña molestia le pasa factura. "Seguí peleando, pero la técnica que me señalan me penalizó, luego en la repesca salió todo bien", apunta. Y tan bien. Una medalla de bronce que muestra con orgullo.

Esta presea no es la primera que consigue en un Campeonato de España, aunque las anteriores habían sido en pruebas de categorías inferiores; una plata en cadete y otra en sub-21 y sendos bronces, en categoría cadete y junior.

Sus sensaciones en el Campeonato de España de Sevilla fueron buenas. "Me noté muy ligero sobre el tatami,, disfruté mucho y nunca me había sentido tan bien", reconoce. El langreano no escatima a la hora de agradecer a todas aquellas personas que han estado cerca de él; "a los seleccionadores Rufo y Lino, por confiar en mí y sobre todo a mi padre, que es el que me entrena". El kárate está presente a todas horas en la vida de la promesa langreana. Respecto a esta situación, Carlos Bargados admite que "si el kárate es un deporte que te gusta, no importa el tiempo que le dediques".

Sus sesiones de trabajo oscilan entre las dos y las cuatro horas diarias y además lo compagina con otras artes marciales como el tai-jitsu. "Es un deporte muy exigente, una auténtica carrera de fondo, donde si te quedas atrás, te llevan y donde toca prepararse en muchos aspectos: físico, técnico, estratégico y sobre todo psicológico", apunta Carlos Bargados. La concentración y las emociones resultan fundamentales en cada combate.

Los retos del langreano se centran en el Campeonato de España de categoría sub-21, que tendrá lugar entre el 23 y el 25 de noviembre en Ponferrada. Ahí tratará de seguir sacando a relucir todo su potencial. Sus objetivos son ambiciosos. "Tengo pensado llegar a lo más alto", reconoce Carlos Bargados. Con esfuerzo, trabajo y sacrificio, el joven karateka de La Felguera ya se sitúa entre los grandes.

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