Recuerdo con cierta nostalgia amarga aquellas incomprensibles disputas por la capitalidad salmonera astur entre Pravia y Salas, de hace más de una década ya, que jamás llegué a entender. Ahora la disputa se ha focalizado entre Cornellana y Cangas de Onís, a costa de sus respectivas subastas del campanu, aunque conviene aclarar que la segunda se celebra en el concejo de Parres en la orilla occidental del Sella. El ocaso del evento es notable, si consideramos su impacto mediático o el precio pagado por el ejemplar subastado, y todo el mundo es consciente de ello, por lo que se piden actuaciones inmediatas que lo revitalicen. A mí me sigue resultando chocante que la única noticia de la temporada salmonera sea la subasta del campanu, a escala nacional, y que el resto del año nadie se acuerde de él. Esa es la realidad de la pesca del salmón en Asturias, la misma cantinela desde hace décadas. Lo que nunca fue y jamás será.