La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los últimos druidas

El silbo del viento se oyó en Rueda

Pequeño es el hombre desde la cumbre de una montaña. "?Después de tanto todo para nada?" escribe en un poema José Hierro. Y, sin embargo, allá abajo nos partimos las entrañas en el encuentro de nuestras miserias con todo lo que de ruin llevamos dentro. Día hermoso de un otoño pleno de calor y excursión por todo lo alto de dos amigos del alma cronistas ellos y mensajeros con la noticia fresca en este diario. A nuestro lado, el donaire y la belleza femenina de Sonia que trepa ladera arriba como una grácil hembra de rebeco. La historia y la vida de los concejos de Quirós y de Teverga a cada paso y en la retinas cientos de imágenes de la comarca con mil palabras cada una. El silbo del viento vuela sobre Rueda a nuestra llegada, mientras la vista se pierde en vastos horizontes: Las Ubiñas, Las Babias, El Ferreirúa, El Urriellu, la mar al fondo y más allá Haití muerto de hambruna. De levante nos llega el último vuelo de Marta Portal. Volveremos a leer sus sabias palabras. Meditar es hablar con el alma.

Compartir el artículo

stats