Hay que valorar el esfuerzo que nuestro Ayuntamiento de Siero hace para atención a necesidades sociales básicas. Esas necesidades atienden a alimentación, alquiler, energía. Como se hace en la Administración, el acceso a ayudas es mediante un factor sobre el IPREM, que este año es de 532,51 euros mensuales restados previamente los gastos de renta o hipoteca, comunidad o IBI. Así pues, una unidad familiar de tres miembros, una vez descontados los gastos predichos, debiera tener una renta mensual inferior a 692,26 euros, recibiendo una ayuda para compra de alimentos de 105. El Ayuntamiento argumenta que como la entidad ya ayuda, no aceptará en los convenios con Cáritas facturas de vales entregados a familias para compra de alimentos. Pero hay un detalle que se escapa. El límite económico para una familia del tipo descrito, Cáritas lo establece en 285 euros, no en 692,26. El Ayuntamiento concede la misma ayuda a quien tiene 0 euros de renta que a quien tiene los casi 700. Los vales de Cáritas son para los más necesitados dentro de la necesidad, y bien poco es. Para este caso, sólo 38 euros. Cerrar esta puerta sólo perjudica a los más pobres.
