El 14 de marzo de 1964 culminaba los estudios un curso del Seminario de Oviedo con su ordenación sacerdotal en La Felguera. Habían empezado en 1952 en Covadonga. Unos terminaron, otros no. Unos permanecen en el clero y otros tomaron otros caminos pero todos los años siguen reuniéndose para conmemorar aquel acontecimiento. Este miércoles el reencuentro se celebró en Villaviciosa con Carlos Capellán, párroco en San Juan de Amandi, como anfitrión. Este sacerdote de Lastres, gastado en la emigración europea, compartió con sus compañeros misa en Valdediós y mesa en Amandi: Evaristo Medina Álvarez, Jesús Faya, Ángel Solís, Marino Zapatero, Artemio González, Custodio Díaz, Cayo González, Enrique Iglesias, Juan Manuel Sabugueiro, que viajó desde Londres; José Manuel Fuentes; Jesús Vega; Alfonso Rodríguez; Constantino Menéndez; José Luis González Nuevo; Macrino García; José Luis Fernández Suárez; José Antonio Fernández; Mario Ania; y Ceferino Álvarez. Con ausencias como las de Fernando Menéndez Viejo; José Antonio Olivar; Manuel Suárez; José Ramón Alonso Nieda; o la de Laurentino Gómez. Y con el imborrable recuerdo de compañeros que ya no están: José Vicente Ordóñez Noriega, Pepe el Turrau; Miguel Ángel Díaz Bardales; o el eminente sacerdote Silverio Cerra Suárez.
Hombres de siempre, acaso con mejor temple que nunca, espíritus nobles, este grupo que compartió estudios en la edad entusiasta y generosa, mantiene amistades profundas y duraderas. Conservan inmensas reservas de inteligencia y espiritualidad y cada víspera de los Idus de Marzo recrean su tiempo con fraternales recuerdos.
