Este pasado lunes fallecía el gaitero entreguín Alfredo Noval Antuña, campeón de Asturias en el año 1977.
El 29 de agosto de ese año, tuvo lugar en Peón, Villaviciosa, un concurso de gaiteros donde se decidía quién sería el campeón de Asturias de ese instrumento, y hasta allí viajamos cuatro buenos amigos: Luis Estrada, Abelardo Fuentes (Q. E. D.), Alfredo Noval y el que éste artículo firma.
El jurado estaba presidido por José Remis Ovalle, Gaitero Mayor de España, y participaban los más afamados gaiteros de Asturias, entre ellos el malogrado Manolo Quirós, que obtuvo el segundo lugar en la clasificación. Alfredo interpretó en aquella ocasión "Jota asturiana", "Xiringüelu" y "Fandango". También participó en ese concurso Luis Estrada, que consiguió el premio de los gaiteros maliayos. Recuerdo que la celebración posterior por la consecución de ambos premios fue por todo lo alto, no faltaron en Peón las tonadas, los coriquinos, los bailes regionales (de los que Abelardo Fuentes era un consumado intérprete) y, por supuesto, la gaita. Alfredo Noval fue uno de los mejores gaiteros que ha dado Asturias. Un verdadero virtuoso de la gaita, siempre dentro de la mayor ortodoxia de la música tradicional en lo que respecta a ese instrumento, a pesar de que, debido a un accidente laboral, le faltaban algunas falanges en una de sus manos, lo que no le impidió proclamarse campeón regional.
Como anécdota, comentar que, llevado por su enorme amor a la gaita, poco después y a instancias de Luis Estrada, contactó con Emilio Moriyón, el famoso gaitero de Gijón y componente de "Los Lucenses", un grupo que había triunfado durante décadas en Argentina y que por entonces, ya anciano, residía a la entrada de Selorio, Villaviciosa, y consiguió que le vendiera su gaita, una verdadera joya hecha de ébano con incrustaciones de marfil y con llaves para su acoplamiento a la orquesta. Alfredo la conservaba como oro en paño. Además de su ingente trayectoria como instrumentista en solitario, actuando en fiestas, concursos y festivales por todo Asturias, fue un reconocido acompañante de numerosos cantadores asturianos, verdaderos ases de la tonada, como Alfredo Canga, Aurelio Fueyo o su hermana Diagmina Noval, a los que acompañó magistralmente en concursos y en muchas de sus grabaciones discográficas, ya que conocía en profundidad el repertorio de la asturianada.
Antes de finalizar este escrito, quiero agradecer públicamente a Javier de Arroes, que indagó en su extensísimo archivo de folklore asturiano para facilitarme la fecha exacta de celebración del concurso en el que Alfredo Noval se proclamó campeón de Asturias, así como los nombres de los temas que interpretó.
Descansa en paz, campeón.
