Está más que comprobado que la dieta mediterránea es una garantía benévola para la salud. Los estudios científicos lo señalan con frecuencia y dentro de esa excelente dieta destaca como componente fundamental el aceite de oliva virgen extra. Los especialistas apuntan que ese oro líquido, bien sea de la variedad picual, arbequina o cornicabra dentro de un suplemento de otros alimentos saludables, representa beneficios a nivel molecular como una menor oxidación celular que por sí mismos revierten los daños celulares que derivan en un proceso cancerígeno. Y los tumores de mama en mujeres han disminuido notablemente con la ingesta diaria de aceite de oliva virgen extra, lo mismo que los cánceres de colon, páncreas o próstata?
Con cuatro cucharas soperas al día de ese rico producto tan español la protección contra elementos nocivos corporales es clara y meridiana. Ahí reside una política activa de salud. Esa dieta mediterránea a base de frutos secos, pescados a la plancha, aceite verdadero, ensaladas y fruta variada significa un carné salutífero para evitar que los males de nuestros días surjan en esos cuerpos sosegados y tranquilos. Los bichitos que causan los tumores malignos no aparecen en nuestras células buenas con una dieta sana y equilibrada donde el aceite virgen extra esté presente. Los científicos lo dicen continuamente y los estudios realizados durante años han dado resultados inequívocos? Ya saben ustedes, buena comida, dejar las grasas aparte, dos copitas de vino al día, mucha fruta y todo ese producto especial bien planchado. Con el tiempo y el ejercicio corporal diario el cuerpo de cada uno será un escenario abierto con menos peso, agradecido y cargado de buenas sensaciones.
Por lo tanto ese condimento olivarero debe de ser consumido todos los días por toda la población, una manera de acercarse a valores culinarios de altura y alcanzar ese esplendor necesario para sentirse a gusto y con un poco de felicidad a nuestras espaldas. El aceite de oliva virginal es nuestro mejor aliado para prevenir tumores malignos y con una alimentación equilibrada evitará el llamado técnicamente síndrome metabólico, es decir, la aparición de hipertensión, diabetes, hipercolesterolemia y problema cardiacos. Los estudios epidemiológicos están contrastados y en sus trabajos de seguimiento han permitido dar luz verde a una realidad clarividente. El aceite de oliva, el nuestro, es un fuerte protector contra los invasores corporales, esas células tumorales indignas y letales que matan diariamente a muchos habitantes de este suelo patrio.
