Los estudios científicos de ida y vuelta sobre los alimentos los descubrí de niño, cuando era mejor consumir aceite de girasol, porque el de oliva era malísimo. Después descubrieron que el de oliva era uno de los dioses de la salud. Desde entonces, hemos pasado por recomendaciones y vetos sanitarios por todo el espectro alimenticio. Para acabar con el alza del consumo de precocinados, preelaborados y prefabricados, si me apuran, bien aliñados de edulcorantes, conservantes, colorantes..., eso sí, perfectamente registrados y autorizados. A la hora de hacer la compra hay que estar atentos a los estudios científicos y también a los vaivenes políticos. Antonio Masip acaba de mandar una carta al director general de Nutrexpa, que defiende la independencia de Cataluña, para anunciarle que deja de comprar Colacao. Pero como el estómago ruge todos los días y no entiende de científicos y políticos, seguiré comiendo de todo, moderadamente.
