¿Cuándo vas a volver a escribir en la prensa, Heri? Me preguntaba hace unos días un amigo en una cervecería de L"Entregu. Mi respuesta; "Cuándo coincidan les ganes y el tiempu". Tras esa pobre respuesta, tan peregrina, inestable, interina o eventual, como nuestro desgobierno, se escondía una verdad tan grande como la catedral de Uvieu y tan manifiesta como todo lo dicho antes sobre nuestros regidores.Y es qué cada vez que escribo desde la Antropología Económica debo hacer un esfuerzo enorme, desnudar el alma y dejar en carne viva el corazón y eso duele porque analizar el uso simbólico y fáctico del poder te deja extenuado. Así, para no perder al hábito de trabajo, y para relajarme, ocasionalmente, me "regalo" con vídeos, desde mi canal, disertando sobre temas, como por ejemplo, la técnica de salida de tacos en pruebas de velocidad, en atletismo.
Pero estos oasis en el desierto de vanidades de la movida patria son de corta existencia y cada vez más difíciles de encontrar por mor del "efecto invernadero" que la catarsis político-económica nacional suponen, así que me armo de valor y con bálsamo de pomadas y ungüentos varios me encamino hacia el teclado de mi PC. Para empezar, os muestro un salpicón de datos macroecónomicos, como para ir abriendo boca.
El primero y más difícil de digerir es el que ONG como Cáritas o Cruz Roja aportan y que cifra en más de trece millones el número de españoles, compatriotas, en riesgo de exclusión y más trágico aún, casi uno de cada tres niños, pese y digan lo que osen los señores Ministros. Pero "tranquis", que esto es solo el inicio.
La prima de riesgo se ha acelerado y sobrepasa los 155 puntos básicos y no olvidemos que, éste, es un estimador que aglutina entre otros elementos la imagen y estabilidad de la clase política y gobierno del país. Así que podemos esperar una tendencia exponencial, hasta el infinito y más allá si no hay acuerdos ya.
La tasa de paro se dispara una vez pasada la bonanza estacional de la turba consumista navideña e iniciada la empinada cuesta de enero, que desgraciadamente se prolongará más y más tiempo, todo el año quizás. Por contra, la de actividad, se reduce lo que implica un empobrecimiento crónico y crítico del mercado de trabajo español dejando en bolas y entredicho las vitoreadas políticas para reactivarlo del gobierno saliente. Y muestran así, su verdadera y descarnada orientación, la de precarizar y desproteger. Bien, seguimos, para bingo.
Toquemos otro mercado, el financiero. ¿Qué pasa con él? ¿No era de los más estables del mundo occidental? Pues la caída anual acumulada ronda los mil puntos, lo que equivale al 10% de su total. La pasta que buscaba entornos fáciles pata especular -no olvidemos la venta del aeropuerto de Ciudad Real, en julio de 2015, por 10.000 euros- se retrae en parte por la inestabilidad pero también quizás por miedo a que los nuevos gobernantes legislen según gallan y establezcan premisas contra la especulación.
Para finalizar esta mezcla de cifras, solo nos falta conocer el resultado de la política de rentas. Pues bien, datos obtenidos por los currantes del Ministerio de Empleo y Seguridad Social dibujan una realidad distinta a la cacareada desde la cúpula. Tanto sueldos medios y bajos, como pensiones se han mantenido o reducido en estos cuatro años. Lo que significa, debido al efecto de la inflación, es decir hablando en términos reales, que todos ellos se han reducido. Por contra las nóminas blindadas si que han crecido, contra natura.
Y con todos estos mimbres, que hagan otros un cesto, o lo que viene a ser lo mismo un gobierno. Así que no nos extrañe que nuevos y viejos echen pelotas fuera esperando como agua de mayo las próximas elecciones de junio. Mientras, los amos de las camisetas y balones de reglamento marcan líneas rojas, reparten y discuten por asientos en Las Cortes, cambian cromos, entonan cual patético orfeón melodías que ya cansan como "y tú más" o "quítate tú pa poneme yo". Ah, no me olvido de perlas descubiertas que versan sobre el supuesto gambito con el que Mariano Rajoy lanzo un envite al ciudadano Felipe de Borbón, el sexto, Rey de España por Constitución aprobada. Una celada en toda regla para no salir de Moncloa. El colmo del despropósito, ya fuera de toda lógica, blindar el aforamiento de la senadora por Valencia Doña Rita Barberá, que además de burla grotesca contra el pueblo, deja bastante que desear. Porque si no tienes nada que ocultar, das la cara y punto. Se acabó, que alguien ha cantado bingo.
