El pasado fin de semana tuvo lugar en La Felguera el Certamen Llangréu Natural. Certamen que tiene como objetivo poner en contacto el campo, nuestra olvidada zona rural, con la ciudad. Y esa toma de contacto se cumple y nos presta. Llangréu Natural es un lugar de encuentro de numerosas familias, donde niños y mayores ven, descubren y disfrutan de nuestras razas autóctonas con gran ilusión. Los "selfies" inmortalizados en Facebook son innumerables. Todo ello, mientras nuestra zona rural se muere, y hasta el año que viene?
Pero, este año, Llangréu Natural tuvo mucho más que eso, un halo de esperanza. Por primera vez se organizaron dos mesas redondas en torno al certamen de lo más interesantes. Mesas que pusieron el foco de atención en cuál es el futuro y cómo podemos apostar por un sostenimiento real de nuestra olvidada zona rural.
El viernes contamos con la "Re-vuelta al campo en las cuencas mineras", acompañados por Jaime Izquierdo, posiblemente el mayor experto a nivel nacional sobre Desarrollo Rural que, para más inri, es oriundo de Langreo. Jaime aboga por la reconstrucción de la relación entre lo rural y lo urbano para que dejemos de adquirir en un centro comercial la leche que se produce al lado de nuestra casa, por el fomento de los mercados locales como motor de desarrollo, de consumo de productos próximos, generador de microeconomías creadoras de riqueza regional. Definió a los emprendedores rurales actuales, aquellos que apostamos por nuestro medio rural como revitalizador de la economía local, como los nuevos colonos de la economía asturiana.
Pudimos escuchar los problemas a los que emprendedores rurales nos hemos enfrentado (y nos enfrentamos) al crear nuestras empresas. Los problemas que las zonas rurales de la cuencas mineras tienen a la hora de emprender, las limitaciones que nos ponen los diferentes PGOU de las mismas. Redactados y diseñados por personas ajenas al medio rural y que no han tenido (ni tienen) en cuenta a los actores de las mismas.
El sábado hablamos sobre TTIP (Tratado de Libre Comercio entre la UE y Estados Unidos), sobre el varapalo que supone para la soberanía alimentaria de los pueblos. Entendiendo soberanía alimentaria de un pueblo o región como la capacidad de la misma de abastecerse de alimentos y productos producidos/generados en ese pueblo o región.
Que un tercio de la superficie de Asturias sea agraria y genere sólo el 2% del PIB nos ha de decir algo. No se apuesta por el campo asturiano. El Paraíso Natural se está desaprovechando. A pesar de la re-vuelta al campo que parte de unos pocos locos que sentimos la necesidad de crear algo nuevo, de hacer "lo de siempre, como nunca", mientras desde nuestras administraciones no haya una apuesta real por ese tercio de Asturias, no habrá un cambio profundo.
Estamos ante una situación de despoblamiento y tremendo envejecimiento de las zonas rurales y necesitamos un modelo de revitalización de las mismas. Leemos en prensa las bonitas palabras de aquellos que nos representan sobre su supuesta voluntad para solventar estos problemas pero? ¿dónde están cuando se organizan estos actos? ¿Dónde están cuando contamos nuestros proyectos? Esa es la realidad de Asturias y, señores, ustedes no quieren conocerla.
La re-vuelta al campo fue y es bien definida por Jaime Izquierdo y materializada en proyectos como Güerta Escuela La Llera (Laviana), Kikiricoop (con su Asturcilla, en Cabranes), Huertopía (Villaviciosa) y Con Raíz (Langreo). Pequeños pero grandes ejemplos de esa revolución rural que requiere Asturias. Que pueden ser y son parte de una nueva-tradicional economía. Vuelta a lo tradicional con nuevas maneras, recuperando el conocimiento perdido y aportando un nuevo enfoque.
Estamos encantados e ilusionados con lo que hacemos, abriendo camino y siendo parte de ese futuro que tanto necesitan nuestras zonas rurales.
Aprovecho para agradecer el apoyo recibido de "Cauce del Nalón", de LA NUEVA ESPAÑA y el Ayuntamiento de Langreo, organizadores y colaboradores de estos interesantes actos.
