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Regresar al siglo XX

La presencia de Leonardo Padura y Lluís Juste de Nin mañana en Langreo para presentar sus últimos libros

Pocas han sido las ocasiones en que hayamos tenido la fortuna de reunir a dos figuras literarias de talla internacional (cada cual en su especialidad) como va a suceder mañana sábado, a las 12 horas, en la Casa de Cultura "Alberto Vega" de La Felguera. Si ello ya sería suficiente para mostrar nuestro alborozo, no lo es menos el hecho de que los libros que van a presentar: "El hombre que amaba a los perros", de Leonardo Padura, y la novela gráfica "Andreu Nin, siguiendo tus pasos", de Lluís Juste de Nin, funcionan a modo de un afinado escalpelo que se adentra con rigor y con minuciosidad en las entretelas de un período clave para comprender el siglo pasado -"Un siglo que fue, cabe recordarlo, el de la revolución traicionada", en palabras de Albert Camus, como se puede leer en la portada de la novela gráfica-. Una época, pues, de vital importancia histórica, y también un espejo en el que todos deberíamos mirarnos para entender mejor nuestras pulsiones políticas, ensombrecidas, las más de las veces, por interpretaciones oscuras e interesadas.

Los méritos de ambos escritores son sobradamente suficientes para dar fe de su recorrido literario. Si en el caso del cubano Leonardo Padura vienen avalados, entre otros muchos reconocimientos, por el Premio Nacional de Literatura de su país en 2012, la Orden de las Artes y las Letras de Francia en 2013 o por el más reciente "Princesa de Asturias" de las Letras en 2015, el itinerario de Lluís Juste de Nin -artista polifacético: dibujante, guionista, ilustrador, diseñador de moda (diseñó el vestuario para el estreno mundial de la ópera "La Celestina"), miembro del Círculo Catalanista del Ateneo Barcelonés y de la Fundación Andreu Nin- es digno también de reseñar, pues no en balde ha conseguido, entre otros, la Medalla "Antonio Gaudí" a la Creatividad en 2003 o el Premio "Nautilus" en la primera edición del Premio Internacional de Cómic "Ciudad de Badalona" 2010 por su trayectoria en el mundo del cómic catalán. En sus obras, ambos autores han escogido un camino que oscila entre la combinación de hechos históricos y la ficción narrativa, poniendo el énfasis, en el caso de Leonardo Padura ("El hombre que amaba a los perros"), en un acontecimiento crucial del siglo XX como fue el asesinato de León Trotsky a manos de Ramón Mercader. Por lo que respecta a la novela gráfica de Lluís Juste de Nin, el peso de la misma recae en la vida de Andreu Nin, que llegó a ser secretario general de la CNT, entusiasta de la revolución rusa (viajó a Moscú en 1921, representando a la CNT, y allí permaneció hasta 1930). Después se hizo trotskista, profundamente antiestalinista y al estallar la guerra civil, en 1936, se convirtió en Consejero de Justicia de la Generalitat de Catalunya. Tras los hechos de mayo de 1937, y la represión seguida contra el POUM, fue secuestrado por la policía política soviética -que actuaba clandestinamente en la España republicana- y murió asesinado.

Si un escritor es un observador de la realidad, a la que intenta retratar en toda su dimensión, pienso que los casos a los que nos referimos cumplen con creces esta tarea. "El hombre que amaba a los perros" es una novela río que interroga esa realidad de un modo honesto y heterodoxo. Y en cuanto a la novela gráfica "Andreu Nin, siguiendo tus pasos", es un muestrario veraz de la profunda huella que ha dejado Andreu Nin entre todos aquellos que siguen luchando por la emancipación social y nacional, a las cuales había dedicado su vida.

Gracias a la "Semana negra" y al Ayuntamiento de Langreo, pues su colaboración ha permitido a la Fundación Andreu Nin de Asturias hacer posible este relevante acto. Mañana nos vemos.

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