La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Mario Antuña

Siete leguas

Mario Antuña

Tiene que ser cosa del calor

Va a ser cosa del calor. Eso de que suba el termómetro por encima de los treinta y pico grados por estas tierras debe de provocar turbulencias existenciales que nos afectan gravemente. Si no es por este motivo, no me explico que a tres rumanos de una banda los pillen con las manos en el butrón cuando intentaban robar en una empresa de Riaño y estén en libertad tras un juicio rápido en espera de otro. Confío en que cuando refresque se presenten ante el juez. No muy lejos de ese polígono industrial, ayer fue agredido uno de los socorristas de las piscinas por un grupo de inciviles individuos que pretendían bañarse como les saliera de la jeta. Una cachava y una barra de hierro fueron sus argumentos para zambullirse sin gorro. Y qué decir del vodevil del exjefe de la Policía Local de Oviedo, el ínclito y temido en su día Agustín de Luis, en busca y captura tras anunciar que él mismo ingresaría en prisión. Sí, tiene que ser cosa del calor, porque si no...

Compartir el artículo

stats