La historia del ferrocarril unió a Langreo y a Gijón con la cuarta vía férrea construida en España, en 1852. Ambos concejos pueden volver a unir sus destinos ferroviarios 165 años después. Pero el acontecimiento puede ser luctuoso. Langreo y Gijón pueden llegar a disponer de un túnel para un tren que no pasará, después de cuantiosas inversiones dilapidadas bajo tierra. El gran proyecto del metrotrén gijonés es hoy un agujero bajo la ciudad de Gijón que costó más de 100 millones y del que cada año hay que sacar el agua para evitar su inundación. No hay previsiones de cuándo puede albergar convoyes. El soterramiento de Feve en Langreo corre el mismo peligro. Es una amenaza real. El año que viene se acabará la excavación y construcción del túnel, con las inversiones del Principado que sustituyen los fondos mineros cerrados por Rajoy. Queda por saber si el Ministerio de Fomento pondrá los raíles para evitar que sea otra vía muerta.