¿Han visto? Apenas unos días de la publicación, en este diario, de la necesidad de nuevos espacios propicios al desarrollo de actividades culturales, sociales y lúdicas, y parece que suenan campanas, no muy lejanas, para que las instalaciones de la antigua Obra Social y Cultural de la Caja de Asturias (hoy Liberbank), en la calle Jerónimo Ibrán, pasen a disposición de la ciudadanía de Mieres, para su uso en las lógicas y debidas condiciones.

Aunque no existe una confirmación oficial, ciertas voces, más o menos autorizadas y con el sello de certeras, señalan que, en estos momentos, existen ya algunos contactos, entre lo que creemos se trata la Fundación de Liberbank y el Ayuntamiento de Mieres para la cesión de esas estupendas instalaciones existentes en la citada calle, una arteria que, por arte de su peatonalización y la creciente tendencia de establecimientos de hostelería, es una arteria viva. Y todo ello con vistas al uso y disfrute de una población casi huérfana de espacios comunes para tales menesteres.

Eso sí. Todo hace indicar que no se trata solo de negociar las zonas del salón de actos y sala de exposiciones, más los equipamientos complementarios de los bajos, sino de todo lo que conformaba las antiguas instalaciones de la antigua Obra Social y Cultural de Cajastur, es decir, también las dependencias de la primera planta del inmueble donde se concentraba los servicios destinados a la atención y disfrute de los mayores. Eso quiere decir que se aumentan las posibilidades, porque tampoco en equipamientos para la edad veterana estamos muy sobrados.

Parece que las negociaciones van avanzando ya que Liberbank no exigiría más contrapartida que librarle de todo gasto relacionado con el uso, como puede ser la limpieza, energía eléctrica, agua y demás, aparte, claro está, del personal correspondiente para la atención y dirección de las actividades. No puede decirse que la oferta sea inaceptable, si es que todo fructifica en un final de buen puerto. Adelante pues.

La propuesta: Siento decirlo de esta forma tan directa y en nombre de la Tertulia "Por el Camino". El Ayuntamiento de Mieres estará muy mal de "perras", aunque todo indica que poco a poco se van saneando las arcas, pero no es de recibo que no se realice un elemental lavado de cara al casco urbano, porque de seguir así, nos va a comer? la porquería. Y sino échenle un vistazo a calles como San José de Calasanz donde las palomitas están dejando claramente decoradas las aceras y los bajos de sus paredes. La propuesta es, "¡ojo, al dato!, por una vez zafarrancho de limpieza.

La crítica: Lo del paso subterráneo para salvar la A-66 y pasar al viejo puente de La Perra, camino del apeadero de Renfe, ya no tiene nombre apropiado. Como se suele decir, ya pasó del castaño oscuro. Sin más.