La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Dando la lata

Día de Navidad

Bueno, pues si hay que ir a votar el próximo 25 de diciembre, se va. Tampoco será para tanto. Con los vapores de la Nochebuena aún presentes en la sesera, quién sabe, igual desatascamos la situación de una vez. Que no es que yo tenga ningún deseo de que haya gobierno, pues me reafirmo en la convicción de que así estamos mejor, pero como el derecho político y la Constitución se empecinan en la insalvable necesidad de su existencia y ejercicio, habrá que resolver lo que sus señorías no son capaces. Y el día de Navidad no tiene nada de malo para votar. Incluso es posible que estemos algo más iluminados. Hay tiempo para todo, se sea cristiano practicante o no. Para estos últimos no deja de ser un festivo más, como cada jornada de comicios. Para los creyentes es el día más importante del año. Y en días importantes, decisiones importantes. Que a la tercera va la vencida. Eso sí, de confirmarse la convocatoria, los máximos perjudicados serán los pobres desgraciados a los que caiga el marrón de formar parte de las mesas electorales. Qué faena. Se impone la solidaridad y qué menos que acudir a las urnas espumosos y turrones en ristre, para que a presidentes, secretarios y vocales se les haga el día más llevadero. Y villancicos si se tercian. De algún modo hemos de recompensarles por su privación de festejo. El 25 y la noche del 24, que no es moco de pavo.

Tengo unos amigos convencidos de que si hay terceras elecciones arrasará Rajoy. No lo tengo tan claro. Que hasta ahora no haya logrado investirse es tan responsabilidad ajena como propia y para conseguir más adhesiones hay que ajustar el paso de baile. Y, no sé, pero no veo a Mariano bailando. Nos faltan tradición y calidad democráticas, y eso queda patente en los momentos delicados, cuando se impone el interés de la nación y sus moradores. Es una carencia que, Dios lo quiera, se solucionará con tiempo y práctica, pero que a día de hoy condiciona la gobernabilidad de España a la obtención de una gran mayoría de votos. Los multipartidismos aún no están bien vistos. Y con un electorado cada vez más diverso, así estamos. 25 de diciembre, fun, fun, fun.

Compartir el artículo

stats