Después de muchos días y leer con cariño la vida de 100 años de "La Montera", llegué al final de sus más de 500 páginas escritas con detenimiento por Julio José Rodríguez Sánchez a quien, de nuevo, le doy la más sincera enhorabuena, sin que por ello deje de apartarme del prólogo que tan acertadamente resumió su autor, que con su lectura casi plasmó la obra de Julio José.
¿Se acuerdan de mi queja por lo que tardó en llegar referido libro a mi poder? ¿Y de la alegría que me lleve cuando al fin aterrizó en mi casa en esta meseta castellana? Pero al fin llegó a su destino, me impactó su encuadernación y me encandiló su completo texto e imágenes. ¿Y a ustedes, qué les pareció? ¿Lo tienen en su casa? ¿Lo han visto si quiera sin que hayan consumido sus 500 páginas? Den su opinión sin miedo, porque no hay miedo que ocultar y sí mucho que agradecer. Es y será un buen libro para tener en su casa, en su mueble estantería. Como les digo al principio, sin epílogo, pero es un libro con un buen final que es lo importante.
